ELA denuncia el desmantelamiento de Anatomía Patológica de Irun, Zumarraga y Mendaro

Continuan las políticas de desmantelamiento de los servicios de Osakidetza. La nueva cultura mencionada por la consejera Sagardui va cobrando fuerza y sigue con su plan de cerrar cada vez más servicios. Ahora llega el turno de Anatomía patológica de los hospitales comarcales de Gipuzkoa.

Osakidetza lleva años intentando desmantelar los laboratorios de Anatomía patológica de Irun, Zumarraga y Mendaro, bajo el mantra de un plan director de unificación y reorganización. Pero sigue sin trasladar los detalles a trabajadores y sindicatos.

Hace siete años, en 2016, la Dirección ya intentó centralizar la Anatomía patológica de Gipuzkoa en su totalidad, una vez más, con la excusa de la reorganización. Pero el plan se paralizó gracias a su falta de coherencia y a las movilizaciones impulsadas por ELA. Actualmente, sin grandes explicaciones y aprovechando el traslado del médico patólogo a Basurto, Osakidetza ha decidido suprimir las plazas de médico patólogo de los tres hospitales de la comarca guipuzcoana. Así como una plaza de técnico en anatomía patológica. La excusa ha sido la falta de profesionales, pero no han hecho ninguna referencia a las condiciones laborales de los profesionales, a pesar de ser la principal causa de la escasez de especialistas.

En el Hospital Donostia, igual que en Basurto

El planteamiento que hace Osakidetza es el de centralizar el servicio en el Hospital Donostia, tal y como ha planteado, por ejemplo, con la cirugía cardíaca de Basurto. En este caso, igual que en aquel, se plantea desmantelar un servicio que funciona y que va a sufrir una importante merma en su calidad. El servicio de Anatomía Patológica se encarga de las biopsias de los y las pacientes. Así, las muestras van a tener que viajar de los hospitales comarcales al Hospital Donostia, poniendo en riesgo la trazabilidad  y demorando el resultado.  Por si esto fuera poco, ni siquiera se ha resuelto la forma en la que se va a hacer ese traslado.

A ello se le añade el hecho de que se va a sobrecargar, todavía más, el servicio del Hospital Donostia que ya, a día de hoy, sufre retrasos debido al alto volumen de trabajo. Lo único que van a conseguir es que las biopsias de los hospitales comarcales vayan a la cola, que se pierda calidad del trato de la biopsia y como no, la relación directa y muy importante entre las personas del equipo de cada hospital.

ELA quiere denunciar que este es un paso más en el desmantelamiento de la atención sanitaria que están sufriendo  las comarcas de Gipuzkoa. Recordemos el conflicto de los quirófanos de Bidasoa, el cierre de PACs como el de Zumarraga, o el desmantelamiento del servicio de salud mental infantil de Zumarraga y Azpeitia.