ELA rechaza el ERTE porque VW Navarra quiere mantener sus beneficios a costa de su plantilla y del dinero público

28/08/2018
La multinacional no presenta causas que justifiquen la medida, más allá de un error de planificación en sus suministros que podría asumir con su margen de beneficios.

ELA rechaza la aplicación del ERTE que Volkswagen Navarra plantea para toda su plantilla de Landaben, principalmente porque la multinacional pretende resolver un fallo propio de planificación de suministros a costa del salario de la plantilla y del dinero público que todo expediente de regulación implica.

VW Navarra pretende parar la producción durante ocho días concretos, mientras aumentan las horas extras y la temporalidad en la contratación se convierte en estructural. En definitiva, la aplicación del ERTE debería ser incompatible con lo anterior, y además alude a unas causas que no justifican este tipo de medidas traumáticas. Aceptar el ERTE con esas causas supondría un gravísimo precedente muy peligroso de cara a futuras situaciones, incluso aunque los salarios queden complementados al 100%. Por todo ello, ELA se plantea recurrir a Inspección de Trabajo para iniciar, en su caso, la impugnación del ERTE.

VW Navarra no ha justificado formalmente el ERTE, ni ha explicado por qué incluirá en el mismo a toda la plantilla, incluido el personal no afectado por las supuestas causas (fallos en el suministro para la cadena de producción), lo que supone una práctica claramente abusiva. En definitiva, VW Navarra quiere ahorrarse gran parte del salario de su plantilla durante ocho días a costa del erario público (aproximadamente, 1,5 millones). Su objetivo único es no renunciar bajo ningún concepto a sus beneficios (55,9 millones en 2017, incluso asumiendo entonces 10 días de cierre).

ELA ve innecesario el expediente, ya que existen otras alternativas. De hecho, VW Navarra es la única planta donde en esta situación se recurre a un ERTE (en Seat-Martorell, por ejemplo, se anulan las jornadas adicionales previstas, fines de semana, etcétera). En Landaben, esas jornadas podrían emplearse para impartir formación, crear polivalencias (en vistas al lanzamiento del T-Cross). También se podría realizar producción a menor ritmo (suprimir turnos, anular sábados...), adecuando el ritmo de la cadena a la disposición de suministros. La conjunción de estas fórmulas haría innecesario el ERTE.

Por otra parte, la aplicación del ERTE perjudicará gravemente al personal eventual (muchas personas perderían el derecho a cobrar el desempleo al final de su contrato), por lo que este colectivo no debería estar incluido en ningún caso. Además, este ERTE supondrá medidas traumáticas para las plantillas de muchas empresas proveedoras de Landaben.