BELICISMO
ELA rechaza el plan de Sánchez de aumentar al 2% del PIB el gasto en defensa

El sindicato ELA ha expresado su rechazo total al plan del Gobierno español de aumentar el gasto en defensa hasta el 2% del PIB en 2025, lo que supondrá una inversión de 33.123 millones de euros, 10.471 millones más que en el año anterior. Para la organización sindical, esta decisión responde directamente a un mandato de la OTAN y se inscribe en una lógica belicista que está ganando terreno en Europa, con el Estado español completamente alineado con dicha estrategia desde el primer momento.
ELA critica que el Ejecutivo haya presentado esta iniciativa bajo el título de “Plan nacional para el desarrollo e impulso de la tecnología de defensa y seguridad española”, cuando, según el sindicato, más de la mitad de los recursos estarán destinados al fortalecimiento de las Fuerzas Armadas y al gasto en armamento. En su análisis, ELA advierte que este tipo de políticas refuerzan el papel de la OTAN, cuyo secretario general, Marc Rutte, ha abogado por una alianza “más fuerte, más justa y más letal”. Además, ELA anticipa que la presión para alcanzar el 3% del PIB en gasto militar podría situar el presupuesto en defensa del Estado español en torno a los 50.000 millones de euros.
El sindicato denuncia que esta apuesta por la industria militar se está llevando a cabo con un importante déficit de inversión en políticas sociales, tanto en el conjunto del Estado como en Hego Euskal Herria. Según ELA, los niveles actuales de inversión pública en sanidad, educación o vivienda ya están por debajo de la media europea, y aumentar el gasto militar sin incrementar el gasto total —como ha declarado el propio presidente Pedro Sánchez— implicará recortes encubiertos en estos ámbitos fundamentales. Por ello, acusan al Ejecutivo de mentir al asegurar que el incremento en defensa no afectará al gasto social ni a los ciudadanos.
Otro de los puntos más críticos del sindicato es la falta de transparencia con la que se plantea el plan. ELA denuncia que los nuevos 10.471 millones se movilizarán sin pasar por un nuevo proyecto presupuestario ni por control parlamentario, utilizando fondos no ejecutados de ejercicios anteriores o redirigiendo fondos europeos como los Next Generation EU hacia el gasto militar.
La organización también muestra su sorpresa por la actitud del partido Sumar, al que acusa de adoptar una postura “tibia” ante una medida que considera incompatible con los principios de una fuerza política de izquierdas. A juicio de ELA, cualquier formación progresista debería oponerse frontalmente a un incremento del gasto en defensa de esta magnitud.
Finalmente, el sindicato se muestra especialmente crítico con el respaldo que los gobiernos vasco y navarro han dado a la inversión en la industria armamentística, acusándolos de alinearse con los intereses de las grandes corporaciones del sector y de legitimar la integración de la sociedad vasca en una economía de guerra. ELA recuerda que en 1986 la mayoría social de Euskal Herria rechazó la incorporación del Estado español a la OTAN, y reivindica esa posición histórica como vigente y necesaria.
ELA cierra su posicionamiento reafirmando su compromiso con la paz, su oposición a la militarización y su voluntad de seguir movilizándose para exigir que los recursos públicos se destinen a derechos sociales básicos como la sanidad, la educación y la vivienda, en lugar de a la industria de la guerra.