OSI Barrualde Galdakao
ELA y ESK denuncian la sistemática falta de medidas de prevención contra el calor

ELA y ESK han realizado hoy una concentración en el Centro de Salud de Etxebarri para denunciar un problema que viene de lejos: las altas temperaturas que soportan usuarios y plantilla durante el verano en muchos centros de salud. En la movilización llevada a cabo hoy, han denunciado la sistemática falta de medidas de prevención contra el calor en la OSI Barrualde Galdakao.
Esta situación se repite año tras año, cada vez con mayor virulencia y ni la Dirección de la OSI Barrualde ni Osakidetza han tomado medidas que garanticen ni la salud de la población a la que se debe prestar un servicio con garantías mínimas, ni de las plantillas de los centros de salud afectados, que soportan altas temperaturas durante toda la jornada de trabajo.
ELA y ESK han denunciado que se están superando ampliamente las temperaturas establecidas en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, pero ni siquiera se han realizado mediciones de las mismas, pese a haberlo requerido repetidamente los delegados y delegadas de Prevención.
La respuesta de Osakidetza es que el problema “se está estudiando”, que está “en manos de mantenimiento”, que las obras son “complicadas” o que no se pueden poner más “pingüinos” (aparatos) por el gasto en electricidad.
Entre tanto se producen síncopes por el calor en los pasillos del ambulatorio de Basauri o temperaturas que superan los 30º en el Centro de Salud de Orduña, cuyos trabajadores se veían obligados a cerrar el centro de salud esta misma semana, todo ello en un mes de junio en el que según los datos oficiales, 26 personas han fallecido por el calor.
Todo esto es un reflejo del deterioro y la falta de inversión que sufre Osakidetza y que es especialmente acentuado en la Atención Primaria, con recortes directos durante 6 meses al año, y sin condiciones adecuadas y salubres ni para la plantilla ni para las y los usuarios cuando los centros están abiertos. Por desgracia, esta situación no es exclusiva de esta OSI y de la Atención Primaria. El verano pasado se vivió una situación muy parecida en el servicio de partos del Hospital Basurto, en el que tanto la plantilla como las usuarias soportaban temperaturas que alcanzaban los 38 grados, poniendo en serio riesgo la integridad física de la plantilla y de las mujeres usuarias.
El episodio de calor extremo de estos días ha remitido, es el momento de poner en marcha soluciones urgentes antes de que llegue el siguiente.