Este 25 de noviembre, ELA se marca el objetivo de erradicar el acoso sexual de los centros de trabajo

25/11/2022
Este 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las mujeres, ELA ha querido visibilizar las situaciones de acoso sexual que se producen en los centros de trabajo. Con este motivo, el sindicato ha organizado un acto bajo el lema "El acoso sexual en los centros de trabajo, secreto colectivo" en la sala Harresi, de Agurain, en el que han tomado parte militantes del sindicato. Las encuestas realizadas por ELA en el marco de su campaña contra la precariedad han aflorado nada más y nada menos que 183 casos de acoso sexual, por lo que el sindicato entiende que estamos ante un problema de enorme gravedad que hay que erradicar y empieza a poner los medios para ello.

En el acto, mujeres ELA que han vivido situaciones de acoso sexual han aportado su duro testimonio y han animado a denunciar y erradicar estas prácticas de los centros de trabajo. Han hablado de su miedo, de la sensación de soledad que han sufrido, de la falta de empatía de gran parte de sus compañeros e, incluso, compañeras, de la inacción de las empresas… Han visibilizado una situación más habitual de lo que, sin duda, nos gustaría como sociedad.

En este sentido, responsable del Area de Género del sindicato han subrayado que las medidas contra el acoso sexual deben formar parte ineludible de las reivindicaciones planteadas en la negociación colectiva. Para ello ha demandado que se establezcan protocolos legales eficaces, ya que actualmente solo se conoce una pequeña parte.

Según un estudio de la Universidad de Deusto, el 92% de los casos de acoso en los centros de trabajo no se denuncian. “Numerosas situaciones se reflejan en bajas médidas o bajas voluntarias. Y vemos que con frecuencia detrás de las bajas por riesgos psicosociales o permisos laborales que se cogen se esconden este tipo de situaciones”. 

 

El  acoso adopta numerosas formas, desde las agresiones verbales hasta las físicas.

Ante esta situación ELA exige  protocolos obligatorios por ley que sean eficaces contra el acoso sexual. Para ello emplaza a las administraciones a sancionar a las empresas que carezcan de los citados protocolos. Ello implica, por una parte, que el Gobierno Vasco debe crear un registro oficial, igual que con los Planes de Igualdad, y que el control por parte de la Inspección debe ser más estricto (hay que duplicar el número de inspectores). Por otra parte, Emakunde debe ofrecer una asistencia integral a las personas que hayan sufrido acoso sexual. En cuanto a los riesgos psicosociales, en todas las valoraciones de puestos de trabajo hay que tener en cuenta el riesgo de acoso sexual.

ELA seguirá luchando para hacer que el acoso sexual en los centros de trabajo salga a la luz y ha elaborado un protocolo sobre acoso sexual para ello.