La declaración sobre el salario mínimo acordada por el Parlamento Vasco es irrelevante y propagandística
ELA considera positivo abrir un debate público sobre el salario mínimo, más en un contexto en el que la patronal acumula los mayores beneficios de todos los tiempos y se niega a subir los salarios. Dicho esto, la Proposición no de Ley acordada entre PNV, EH-Bildu, PSE-EE y Elkarrekin Podemos responde a los intereses propagandísticos de los firmantes y no a establecer un salario mínimo digno para las personas trabajadoras de la CAPV.
ELA, junto con LAB, antes de convocar la Huelga General del 30 de enero de 2020, propuso a CONFEBASK un acuerdo interprofesional para establecer, entre otros, un salario mínimo de 1.200 euros. También se mantuvieron reuniones con el Gobierno Vasco para informar de la propuesta y solicitar su colaboración en el proceso. CONFEBASK se negó a debatir la propuesta, incluso a constituir una mesa negociadora, y el Gobierno Vasco no ofreció ninguna ayuda.
Asimismo, ELA presentó en 2014 una Iniciativa Legislativa Popular que recogió 110.000 firmas, para establecer requisitos laborales mínimos en las subcontratas de la Administración. Mediante esta iniciativa, el sindicato exigió establecer un salario mínimo de 1.200 euros en las subcontratas de las administraciones. El PNV y el PSE-EE cerraron la puerta a la discusión del tema e imposibilitaron su tramitación. En estos momentos ELA tiene en marcha varias huelgas para que las subcontratas de las administraciones dejen de pagar salarios miserables. Por ejemplo, en las residencias alavesas, financiadas por la Diputación, las trabajadoras luchan por mejorar los sueldos de 1.100 euros estatales, el PNV y el PSE-EE dirigen la Diputación y son cómplices del bloqueo de la negociación. Asimismo, el Departamento de Trabajo que dirige Idoia Mendia en todas las huelgas mencionadas está estableciendo unos servicios mínimos desmesurados, como se ha visto esta misma semana con el personal de limpieza del Hospital de Donostia.
Los firmantes de la Proposición no de Ley han aprobado los presupuestos del Estado en los que reconocen la pérdida de poder adquisitivo del personal de las administraciones y recogen la posibilidad de que el Estado imponga los salarios del personal de las administraciones. Y, en la práctica, los firmantes se niegan a negociar aquí las condiciones laborales del personal de las administraciones. Por ello se han opuesto en la Proposición no de Ley a exigir al Estado la competencia para decidir el salario mínimo.
Por todo lo dicho, ELA considera que la Proposición no de Ley adoptada por los cuatro partidos es absolutamente propagandística. Esta declaración es incoherente porque las partes firmantes se niegan a enfrentarse a la patronal en el día a día, y sólo pretenden justificarse antes de las elecciones. Firman una declaración que no genera ninguna obligación legal mientras renuncian a tomar decisiones con efectos prácticos.
ELA continuará luchando para establecer un salario mínimo de 1.400 euros para Euskal Herria y continuará impulsando huelgas y movilizaciones ante el veto impuesto por la patronal. Asimismo, continuará exigiendo a los partidos que gobiernan las administraciones incrementos salariales coherentes con la declaración que han aprobado.