La falta de personal, la precarización de las condiciones laborales y el caos organizativo son la causa de las posibles dimisiones en las directivas de prisiones

18/05/2022
Según ha podido saber ELA y a falta de una confirmación oficial por parte del Gobierno Vasco, Arantza Collado, jefa de servicio de Gestión de Personal penitenciario y cuatro responsables más de las tres prisiones de la CAPV han presentado su dimisión. ELA vincula estas posibles dimisiones con la caótica situación que se ha creado en las prisiones de la CAVP tras su transferencia como consecuencia de la falta de personal, la precarización de las condiciones laborales y el caos organizativo creado.

El año pasado, en julio, ELA presentó una propuesta a la Consejería de Justicia del Gobierno Vasco ante la inminente transferencia de prisiones. Ese documento hacia hincapié en las bases que debería tener el modelo penitenciario vasco y sus condiciones laborales.

Casi un año después la situación no puede ser más decepcionante: el Gobierno vasco ha hecho caso omiso a las propuestas realizadas por este sindicato y en octubre firmó un acuerdo con UGT-Acaip – sindicato que pese a contrar con una importante representación a nivel estatal, en la CAVP solo representa al 12%—. Ese acuerdo trajo consigo la integración de los/as trabajadores/as en la administración vasca sin una previa propuesta clara de la estructura organizativa de las necesidades reales y del dimensionamiento de la plantilla.

En abril de este año, para paliar el problema de falta de personal arrastrado de aquel acuerdo, el Gobierno volvió a firmar junto con UGT-Acaip otro acuerdo, con las siguientes consecuencias, que ELA denunció:

  • Una doble escala salarial, con una pérdida salarial de 1280 euros para las nuevas contrataciones.

  • No se negocia una estructura que tenga en cuenta las necesidades del sistema penitenciario que se quiere poner en marcha, y se crea una bolsa de trabajo que trae consigo la temporalidad en un ámbito que no existía.

  • En cuanto a la jornada laboral, hay un aumento de las jornadas de trabajo de hasta 15 días de trabajo al año.

Esto ha traído consigo el hartazgo generalizado del colectivo, que ha visto cómo la transferencia se traduce en una pérdida de condiciones laborales y en un gran caos organizativo.

Por todo ello, el colectivo lleva meses mostrando su rechazo a este acuerdo y al caos existente realizando diferentes movilizaciones como la que se va a llevar a cabo mañana en el Centro penitenciario de Araba (Zaballa), a las 15:00h.

ELA pide a la Consejería de Justicia que recapacite, que cambie radicalmente su postura y escuche al colectivo de trabajadoras y trabajadores y que se siente a negociar un modelo penitenciario humano y basado en la reinserción, las necesidades de plantilla para llevarlo a cabo, sin temporalidad, y unas condiciones de trabajo iguales para todas y todos.