La pérdida de poder adquisitivo se acentúa y afecta en mayor medida a la gente con menos recursos

29/06/2022
En el mes de junio los precios (el IPC) han subido el 10,2%, mientras los salarios, pensiones y prestaciones suben mucho menos, por lo que la pérdida de poder adquisitivo es enorme.

Para ELA, el dato del IPC refleja lo que la ciudadanía vive en su día a día: el encarecimiento generalizado de la mayoría de bienes y servicios. A pesar de ello, el sindicato denuncia que los ingresos (los sueldos, las prestaciones, las pensiones, etc.) no están subiendo al mismo ritmo. El aumento de los salarios fijados por convenio en la CAPV se situó en el 5,1% en mayo; en Navarra, en cambio, la subida fue del 3,8%. La subida de las pensiones se quedó en el 3,5%, lo mismo pasó con el SMI, que en 2022 solo ha subido el 3,4% y también con el personal al servicio de las administraciones públicas, a quienes se les impuso una “subida” del 2%. De modo que todos estos porcentajes quedan muy lejos del 10,2% que ha marcado el IPC.

En consecuencia, se está produciendo una pérdida de poder adquisitivo generalizado, lo que también se traduce en un empobrecimiento de la clase trabajadora. Además, en este contexto, la población con menos recursos sale aún más perjudicada, ya que el alza de precios no produce los mismos efectos en toda la población. Los patrones de consumo de los hogares son distintos en función de la renta. Los hogares con menores ingresos consumen una proporción mayor en artículos de primera necesidad, como son los alimentos, alquileres, electricidad y gas. Justamente son esos grupos los que más están subiendo, los alimentos son un 11,2% más caros que hace un año, la electricidad un 30,2%, el gas 19,4%, los hidrocarburos 33,6% y el combustible 86,4% (cifras de mayo).

Pero en este contexto no todos pierden. Las empresas del IBEX-35 tuvieron unos beneficios en 2021 un 83% mayores a los obtenidos en el año 2019 y un 64% más de los beneficios promedio de los últimos 5 años (sin contar el año 2020). Incluso en 2022, empresas como Repsol, ha obtenido un beneficio neto de 1.392 millones en el primer trimestre del año, más del doble que un año antes.