La plantilla de la incineradora de Zubieta, en huelga indefinida a partir del 23 de noviembre por unas condiciones de salud y trabajo dignas

Así mismo, ELA denuncia:
- La falta de medidas en materia de seguridad y salud laboral son una constante desde el inicio de la actividad de la planta. La evaluación de riesgos laborales es inadecuada y no se ajusta a la realidad del centro de trabajo de Zubieta.
- Las jornadas laborales, en mucho casos, se prolongan hasta 12 horas de turno ininterrunpido, estableciendo, a su vez, la obligación de realizar horas extras por encima del máximo legal permitido. Los calendarios se modifican de un día para otro, sin respetar los descansos entre jornadas ni las vacaciones estipuladas. Esta realidad hace imposible compatibilizar el trabajo y la vida social y familiar.
- El convenio de aplicación es el sectorial de limpieza viaria, que aunque engloba a más actividades no da respuesta a la realidad laboral del centro de Zubieta. ELA exige la apertura de la negociación de un convenio de empresa que recoja la realidad específica de la planta.
- La empresa, de manera sistemática, lleva a cabo despidos sin justificación alguna. Esta práctica se viene repitiendo desde el inicio de la actividad. El último despido se ha producido hace escasas fechas. ELA exige la inmediata readmisión de esta persona.
ELA considera imprescindible dar respuesta a la totalidad de las materias denunciadas. La responsabilidad recae tanto en la dirección de Ekobal como en la Diputación de Gipuzkoa. Esta última otorgó la explotación de la incineradora a la citada subcontrata.
La dirección de la empresa debe de cumplir con la legislación laboral y medio ambiental. Tanto quienes trabajan en la incineradora como la ciudadanía, en general, deberían disfrutar de ese derecho.