La suspensión de las reglas fiscales en 2020 y 2021 debe ser aprovechada para aumentar notablemente los presupuestos del Gobierno Vasco y del Gobierno de Navarra

01/10/2020
ELA considera inaceptable que cuando se eliminan esas reglas el Gobierno Vasco y las Diputaciones Forales acepten autolimitarse el déficit

Mikel Noval, responsable de Estudios de ELA, ha señalado que “la suspensión de las reglas fiscales en 2020 y 2021 anunciada por el gobierno de Pedro Sánchez es una buena noticia, aunque insuficiente”.

Noval ha recordado que los límites de déficit y deuda pública, así como la regla de gasto (que establece el porcentaje máximo de incremento del presupuesto de todas las instituciones, también de las de Hego Euskal Herria) son un mecanismo encaminado a imponer las políticas de ajuste en las políticas públicas. “Que se suspenda la aplicación de ese mecanismo es una buena noticia, pero esa suspensión no debería limitarse a dos años, sino que debería ser definitiva. Nos decían que no se podía hacer, pero se constata que sí es posible y que solo hace falta voluntad política para ello”. ELA demanda la derogación de la reforma exprés del artículo 135 de la Constitución, que da prioridad al pago de la deuda frente a la cobertura de las necesidades sociales, así como de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que incorpora esas reglas fiscales ahora suspendidas. De lo contrario, en 2022 el previsible aumento de la deuda pública va a ser la justificación para aplicar fuertes recortes. Eso ya lo vimos en la crisis de 2008, y no debería aceptarse que vuelva a suceder lo mismo.

El responsable de ELA ha señalado que la suspensión de las reglas fiscales para este ejercicio y el que viene debe ser aprovechada para que el conjunto de las instituciones de Euskal Herria (Gobierno Vasco, Gobierno de Navarra, Diputaciones Forales y ayuntamientos) aumenten de manera notable las partidas presupuestarias destinadas a cubrir las necesidades evidenciadas con la crisis sanitaria, social y económica que vivimos. Para Noval, “el Gobierno Vasco y el Gobierno de Navarra se han quedado sin excusas para reducir el enorme diferencial existente en gasto público en salud, educación o servicios sociales respecto a la media europea o para aplicar políticas de creación de empleo. Ya no pueden decir que Madrid no les deja garantizar a todas las personas en desempleo una prestación equivalente al Salario Mínimo, avanzar en el reconocimiento del derecho a acceder a una vivienda o tener cubiertas todas la situaciones de dependencia por un sistema público, universal, gratuito y de calidad.”

Los presupuestos de la CAPV y de Navarra en 2021 van a depender de la voluntad política de quienes nos gobiernan. ELA va a ser exigente en la dirección señalada, para que la prioridad sea garantizar que todas las personas tengan el derecho a unos ingresos y a unos derechos sociales que les permitan poder llevar a cabo una vida que merezca la pena ser vivida. Rescatar a las personas debe ser la prioridad, y se debe pasar de las palabras y de la propaganda a los hechos.

Respecto al acuerdo alcanzado en la Comisión Mixta del Concierto Económico entre el Gobierno Vasco, las Diputaciones Forales y el gobierno español -que establece unos límites de déficit para 2020 y 2021 del 3,5% y del 3% del PIB, respectivamente-, Noval considera que “las instituciones de la CAPV hacen el ridículo y muestran su voluntad de seguir con las políticas de austeridad”. Es inaceptable que el mismo día que se eliminan los límites de déficit las instituciones vascas se autoimpongan unos límites que el propio consejero de Hacienda Azpiazu ha dicho que no sabe si van a ser suficientes o no para paliar la pérdida de recaudación. “Es un ridículo mayúsculo”, ha indicado. El Gobierno Vasco muestra la voluntad de seguir con las mismas políticas cuando el propio Consejero afirma que tiene que haber responsabilidad fiscal, ya que tras estos dos años volveremos a tener que recuperar la senda de la estabilidad presupuestaria. Toda una declaración de intenciones.

Por último, Noval ha recordado la propuesta fiscal que ELA realizó en mayo, en la que “con medidas concretas en el Impuesto sobre Sociedades y en el Impuesto sobre el patrimonio y las grandes fortunas se podría aumentar la recaudación en 3.750 millones en la CAPV y 900 en Navarra”. A pesar de que la suspensión de las reglas fiscales dé un margen de endeudamiento y de gasto a las instituciones, está claro que la idea es volver a su aplicación a partir de 2022, por lo que no aprobar una reforma fiscal en la línea mencionada solo hará, en el mejor de los casos, que los recortes se hagan más tarde”.