Las limpiadoras de la Residencia José María Azkuna denuncian que la reducción del servicio pone en peligro la seguridad de los y las residentes

20/05/2021
Las limpiadoras de la Residencia José María Azkuna, de Amorebieta, están llevando a cabo una nueva jornada de huelga en protesta por los graves cambios impuestos por la dirección y la empresa Clymagrup en el servicio de limpieza de este centro de mayores, que están poniendo en peligro la seguridad de los residentes y la estabilidad del servicio. Las trabajadoras critican, asimismo, la respuesta de la dirección del centro y de la empresa de limpieza a sus denuncias: en vez de reforzar el servicio de limpieza en tiempos de pandemia lo están reduciendo e intentando amedrentar a las trabajadoras por medio de despidos y reducciones de jornada.

Antes de la pandemia, el servicio de limpieza de esta residencia venía adquiriendo cada vez más funciones y sufriendo recortes en el tiempo destinado a las mismas, lo que afectaba directamente a la calidad del servicio y en la atención a las personas residentes. Las cargas de trabajo son tan altas que disponen de 24 segundos para limpiar cada metro cuadrado, a los que hay que restar el tiempo necesario para la atención a las incidencias de los residentes, las desinfecciones y limpiezas generales por cambios de habitación, y las medidas contra el Covid-19 (desinfección de manillas, interruptores, felpudos, ventilación, etc.). Esta situación se ha agravado durante la pandemia ya que no ha habido ni nuevas contrataciones ni ampliaciones de jornada para poder hacer frente a la carga extra de trabajo.

Así las cosas, las limpiadoras de la Residencia José María Azkuna, de Amorebieta, llevaron a cabo distintas huelgas y movilizaciones los pasados 17 de Noviembre, 26 de Enero y 4 de Marzo pidiendo la publificación del servicio, al tiempo que denunciaron ante los tribunales las nuevas funciones que la empresa les exigía; denuncia que fue estimada.

Sin embargo, en vez de reforzar el servicio de limpieza de este centro de mayores, la empresa que se encarga del mismo, Clymagrup, intenta acallar a la plantilla despidiendo a dos trabajadoras a jornada completa y reduciendo el horario de todas y cada una de las demás trabajadoras. Esto se traduce en 130 horas y 33 minutos menos de limpieza a la semana, 104 horas y 33 minutos menos de lo que exigía la Residencia vía pliego en el año 2015. 

ELA entiende que este nuevo recorte es inaceptable tanto para las trabajadoras como para los usuarios y usuarias ya que es imposible garantizar un servicio de limpieza de calidad, con las graves consecuencias que podrían derivarse para la seguridad de los ancianos y ancianas -las personas más vulnerables al Covid- y sus allegados.