Mitxel Lakuntza: “Mercedes-Benz acumula desde 2016 más de 949 millones en dividendos repartido. No hay razón objetiva para no exigir el IPC”

“Mercedes-Benz de Gasteiz es cada vez más rica, mientras sus trabajadores y trabajadoras siguen perdiendo poder adquisitivo”, ha asegurado hoy el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza. “Desde 2016, el grupo Mercedes-Benz acumula más de 949,6 millones de dividendos repartidos. Y, sin embargo, nos dicen que una subida salarial acorde al IPC es inasumible, cuando en el cálculo aproximado del impacto de la masa salarial con el IPC sería el siguiente: 14,35 millones en 2022 y 18,7 millones en 2023 (con una previsión del IPC del 8%). Cantidades perfectamente asumibles: no hay razón alguna que justifique la no subida salarial según el IPC”.

Por tanto, Lakuntza afirma que “lo inasumible e inaceptable es la desproporción que existe entre los beneficios y las condiciones de trabajo del personal de Mercedes”. Y todo ello, además, acompañado por la colaboración del Gobierno Vasco, del que sigue ofreciendo “un trato de favor” a la empresa de Emilio Titos. “El Gobierno Vasco no tiene una política industrial. Para suplir esa carencia se dedican a hacer la ola a las multinacionales, aceptando los chantajes de las misma. Tanto el Lehendakari Urkullu como la consejera Arantxa Tapia no deberían interferir en la negociación colectiva”.

Menos plantilla, más beneficios

Los datos hablan por sí solos: las ventas han crecido de 4.867 millones en 2020 a 5.444 millones en 2021, es decir, un 11,9% más; el resultado de beneficios en 2021 alcanzó los 61'6 millones de euros. Unos beneficios que se suman a los alcanzados en anteriores años: desde 2016 Mercedes-Benz ha acumulado más de 746'6 millones. Todo ello, además, con menor plantilla. El promedio de personal en plantilla en 2021 no llegó a los cinco mil (4.951), cuando en el 2020 se situó en 5.74 personas.

Asimismo, las previsiones de negocio de la actividad productiva son buenas: la planificación de unidades para el ejercicio 2022 se sitúa en torno a las 158.000 unidades, lo que supone un incremento del 25% respecto al ejercicio del año anterior.

Teatro y trato de favor

Pese a que el contexto económico y de beneficios no ha cambiado, la dirección de la planta de Gasteiz ha “teatralizado” una situación que queda lejos de la realidad, utilizando futuras inversiones como moneda de cambio para conseguir empeorar condiciones de trabajo con medidas como la flexibilidad -que gracias a las movilizaciones se ha retirado- y subidas salariales sin garantías, se lamenta Lakuntza: “La empresa ha jugado su papel como se esperaba: defendiendo sus beneficios y crecimiento a toda costa, con una planificación realizada de antemano”.

Una teatralización que ha sido avalada por el Gobierno Vasco. “Los representantes políticos vascos se han posicionado a favor de la empresa desde un primer momento, poniendo a su servicio la repercusión mediática que sus declaraciones públicas suponen”. “En cambio, no ha existido una preocupación por la plantilla, ni por la precarización de las condiciones laborales de ésta en ningún momento. Ni siquiera un intento de contactar con la parte social”.

Por si esto no fuera suficientemente grave “sí se han mostrado dispuestos a valorar el preacuerdo como satisfactorio, felicitando a ambas partes, y dejando de lado a las miles de personas que están secundando la huelga estos días en las calles de Gasteiz”.

En esta ocasión, en cambio, Mercedes se ha encontrado con una plantilla y sindicatos, como ELA, que mediante procesos participativos han dado voz a la plantilla. “El comportamiento de los y las trabajadoras de Mercedes ha sido ejemplar, con unas peticiones claras y justas: no a la sexta noche y sí al IPC, acordes a la realidad de la empresa”. El dirigente de ELA ha recordado que si se aplicase la sexta noche se perderían la creación de más de 800 puestos de trabajo directos.

“Gracias a la huelga y la movilización la dirección ha renunciado a la sexta noche”. Pese a que la empresa sigue defendiendo una flexibilidad a merced de la empresa y a impedir una merma en el poder adquitivo del personal, Mitxel Lakuntza ha querido felicitar a la plantilla, que se está movilizando a favor de un convenio digno y justo para Mercedes, al tiempo que les anima a seguir luchando por sus derechos.