Morir por un puñado de euros y lejos de casa #Landeia230

05/11/2018
ELA denuncia a la empresa donostiarra Eraiki Prest tras el accidente laboral mortal en Alemania de un operario portugués que residía en Gipuzkoa. Este es el reportaje que se recoge en el último Landeia sobre el tema.

ELA ha interpuesto sendas denuncias contra la empresa donostiarra Eraiki Prest ante la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social y el Departamento de Empleo y Política Social del Gobierno Vasco tras el accidente laboral mortal sufrido el 3 de septiembre en Alemania por un trabajador portugués residente en Gipuzkoa. El fallecido, junto a otros cuatro compañeros –dos argelinos y dos marroquíes– había viajado desde Donostia a la ciudad germana de Merkendorf para colocar paneles solares. Eraiki Prest había sido subcontratada por Enova Construction CVBA para la realización de dicho trabajo.

El trabajador perdió la vida tras sufrir una caída desde 15 metros de altura. Se da la circunstancia de que apenas media hora antes del accidente mortal fue fotografiado en lo alto del tejado; fotografía que demuestra que trabajaba sin ninguna medida de seguridad: ni red, ni vallas, ni líneas de vida.

Los cinco trabajadores desplazados a Alemania –un portugués, dos argelinos y dos marroquíes– partieron de Donostia el 1 de septiembre en furgoneta y llegaron a la ciudad alemana en la madrugada del día 3. Tras dormir apenas 5 horas contactaron con un representante de la empresa Enova –contratista de Eraiki Prest–, desayunaron y fueron trasladados a la granja en la que debían sustituir las tejas por placas solares. “Les dicen que suban al tejado sin adoptar ninguna medida de seguridad, –explica Igor San José, responsable de construcción de ELA–. De hecho, sacan fotos para tener pruebas de ello”. Un par de horas después, el trabajador portugués cae de una altura de 15 metros y fallece. A partir del suceso los hechos se precipitan. “El representante de la empresa quita de en medio a los otros cuatro trabajadores desplazados, les lleva al piso en el que iban a alojarse, y el día 5 llegan a Donostia en tren”. Les quitan de en medio lo antes posible para que no puedan prestar declaración ni denunciar las irregularidades de la obra.

Amparados por ELA

Una vez en Euskal Herria, estos trabajadores se ponen en contacto con ELA para denunciar lo sucedido y recabar el apoyo del sindicato. “Estaban asustados y sobrecogidos por la muerte de su compañero”, explica Igor, quien tiene muy claro que tiene que haber una investigación tanto en Euskadi como en Alemania y que las empresas deben ser sancionadas, para que hechos como éste no se reproduzcan ni salgan gratis.

A la vuelta de Alemania estos trabajadores estaban absolutamente desamparados, y no sólo a nivel económico, pero el sindicato les ha dado cobertura de todo tipo para que puedan declarar y se diriman las responsabilidad de lo sucedido. “Los cinco trabajadores aceptaron ir a trabajar a Alemania engañados. Les prometieron un buen sueldo además del pago de la comida y la estancia. Pero nada más llegar allí les dijeron que les iban a pagar 60 euros semanales. La empresa alemana subcontrató mano de obra barata y no especializada: los cinco tenían un contrato de fin de obra y eran peones especialistas. Eraiki ha tardado un mes en pagarles los tres días que trabajaron; han buscado que se fueran de aquí, por eso era importante darles cobertura hasta que se aclare lo sucedido”.

Igor San José afirma que en este caso se han dado un cúmulo de irregularidades y entiende que Eraiki Prest, subcontratada por la belga Enova Construction CVBA, ha incurrido en varias infracciones que deben ser investigadas. “La empresa que los emplea es de aquí, los contratos se hicieron en Donostia de víspera, y el del fallecido, al subirse a la furgoneta que los llevó a Alemania. Los trabajadores no estaban formados para este trabajo, nunca habían trabajado para esta empresa y no habían pasado el reconocimiento médico obligatorio. Las irregularidades son innumerables”.

Piratas con txapela

Otro hecho denunciable es que ningún responsable de Eraiki Prest acompañara a estos trabajadores hasta allí ni enviara ningún recurso preventivo propio, abandonándoles prácticamente a su suerte. “No había ningún encargado, alguien les tenía que haber dirigido”, denuncia Igor, al tiempo que destaca el hecho de que la empresa diera parte a la Inspección de Trabajo de la muerte del trabajador a raíz de la denuncia pública realizada por ELA.

Tras la declaración de los compañeros del trabajador muerto, ahora queda esperar a los resultados de la investigación y la acción de la justicia. Igor San José lo tiene claro. “Osalan está encima del caso y está en contacto con las autoridades alemanas. Debe haber sanciones ejemplarizantes”.

Además del drama humano que ha vivido este grupo de trabajadores, Igor San José hace una lectura sindical y social muy clara de lo sucedido. “A veces tendemos a creer que las empresas vascas de la construcción son poco menos que modélicas y que son otras, las empresas subcontratadas de fuera, las que vienen aquí a realizar dumping social aprovechándose de las necesidades de la gente. Pues en este caso hemos visto que nuestras empresas también realizan ese tipo de prácticas y que aceptan trabajos en Francia y Alemania con gente muy en precario, sin formación... caldo de cultivo ideal para los accidentes”.

Igor San José tiene muy claro cómo atajar esta situación. “Tenemos un buen convenio. Hay que aplicarlo. Tanto a los trabajadores de aquí como los que vienen de la mano de subcontratas piratas. Y las instituciones tienen que implicarse en el cumplimiento del convenio vía sanciones ejemplarizantes. Porque en muchos casos, ese incumplimiento se traduce en vidas rotas”.