Para garantizar el permiso parental es necesario acabar con la precariedad en el empleo en la Administración Pública

12/06/2019
ELA ha participado en la reunión de la mesa general convocada por el Gobierno vasco, y tal y como figuraba en el orden del día, se ha tratado la propuesta de equiparar los permisos de paternidad y maternidad. Tanto en la reunión como en la concentración llevada a cabo frente a Lakua, ELA ha dejado claro que a pesar de tratarse de un paso en el impulso de la corresponsabilidad de los cuidados, se queda corto si no se adoptan otras medidas, tales como reducir la altísima tasa de temporalidad en la Administración Pública, o implantar medidas reales de igualdad.

ELA también ha recordado que en algunos sectores el derecho al disfrute de algunas licencias y permisos no es posible por la escasez de las plantillas y la falta de sustituciones. Además, y teniendo en cuenta que de cada tres trabajadores o trabajadoras una es temporal, es imposible garantizar este derecho.

Más allá de la retórica feminista, a día de hoy el Gobierno vasco es generador de situaciones de discriminación por razón de género.

  • Del total del colectivo afectado por la eventualidad, un 75% son mujeres.

  • La brecha salarial entre hombres y mujeres ronda el 24%.

  • Los planes de igualdad o bien carecen de contenido o de presupuesto para su implementación.

  • En lo relativo a salud laboral, la perspectiva de género es sistemáticamente soslayada.

Por tanto, si se quiere garantizar una igualdad real es imprescindible la adopción de otras medidas. En este sentido, ELA ha solicitado al Gobierno en la reunión de Mesa General que modifique todas las decisiones que propicien situaciones de discriminación:

  • Poniendo en marcha procesos de consolidación para acabar con la grave situación de eventualidad.

  • Eliminando la brecha salarial.

  • Garantizando el derecho a una negociación colectiva real.

  • Estableciendo auténticos planes de igualdad, y asegurando su obligatoriedad.

     

El Gobierno vasco ha dejado pasar otra oportunidad para presentar alguna nueva propuesta sobre el empleo, lo que viene a demostrar que sigue apostando claramente por mantener la eventualidad, extender la precariedad y avanzar en la privatización.

De otro modo sería incomprensible contar con una tasa de eventualidad 11 puntos por encima de la existente en el sector privado (en el sector público de un 35%, y en el privado de un 23%). En Sanidad alcanza un 38%, con 15.000 eventuales; en Educación, entre el 30% y el 65%, según el sector, con 11.000 eventuales; en la Autónoma, más del 35%, con 3.000, etc.

ELA, por su parte, ha vuelto a ofrecerse para debatir en torno al empleo, y ha presentado al Gobierno su propuesta para estabilizar y consolidar a más de 40.000 trabajadoras y trabajadores.

El Gobierno ha rechazado las peticiones de ELA, y una vez más, ha quedado de manifiesto su nula voluntad negociadora y la necesidad de reforzar la movilización como única vía para lograr una negociación real. Las movilizaciones que estamos llevando a cabo en salud y en educación son un buen ejemplo de ello.