Paro prácticamente total en las tres plantas de Tubacex contra el anuncio de despidos y recortes laborales

ELA califica de confusa y chantajista la actitud de la empresa ya que mientras en julio aseguraba que las plantas no eran competitivas y que la solución pasaba por el despido de 150 personas, ahora plantea como alternativa a los despidos una reducción importante del sueldo de toda la plantilla: eliminación de pluses, congelación salarial, importante aumento de la jornada laboral, recorte de beneficios sociales... “Está utilizando la baza del miedo y la inseguridad para amedrentar a la plantilla y que aceptemos un recorte brutal de derechos”, denuncia.
Tanto ELA como el conjunto del comité rechazan el planteamiento empresarial ya que la situación económica real del grupo y de las plantas vascas no está acreditada. Por contra, exigen a la dirección un plan de futuro por entender que la competitividad no se puede basar en los costes laborales. “Quieren aprovechar la coyuntura para cargarse el convenio que firmamos hace año y medio, pero no lo vamos a consentir”, afirman.