Domino’s Pizza, paros contra la precariedad #Landeia

03/07/2019
La plantilla de Domino's Pizza está de huelga. El objetivo es que la empresa se ajuste a derecho y aplique las sentencias ganadas sobre el convenio de aplicación a toda plantilla. Este es el reportaje que se ha publicado en Landeia sobre este conflicto.

 La plantilla de los centros de Domino´s Pizza en Bizkaia (en torno a 100 personas) han llevado a cabo a lo largo del mes de junio 10 días de huelga, hartos de aguantar la situación de enorme precariedad laboral que viven. En concreto, el colectivo se movilizó los días 1, 2, 8, 9, 14, 15, 16, 21, 22 y 23 de junio.

A los motivos que desencadenaron la huelga –precariedad laboral en toda su extensión– ha habido que sumar el despido de dos trabajadores de la tienda de Basauri por secundar los paros. Para Isa García, responsable de ELA-Zerbitzuak, con estos despidos la empresa ha vulnerado un derecho fundamental, y adelanta que ELA demandará a la dirección e iniciará un procedimiento de tutela de derechos. Isa García entiende que con esta actuación la dirección de Domino’s pretende amedrentar a unos trabajadores muy jóvenes y con nula experiencia sindical.

“La empresa está utilizando todo tipo de ardides y estrategias para intentar reventar la huelga, incluso ilegales; les están presionando muchísimo; por eso, también, les tenemos que arropar mucho, para que el discurso del miedo no cale y desactive su lucha. Hemos interpuesto una denuncia ante Inspección de Trabajo por sustitución de trabajadores huelguistas. Han llegado, incluso, a poner anuncios para reclutar gente de manera urgente y con incorporación inmediata, en un intento claro de desactivar la huelga”.

Isa García resalta que, a pesar de las dificultades, la gente está animada, y que la decisión de concentrarse todos juntos y juntas en determinados establecimientos, de manera aleatoria, está sirviendo para que los trabajadores y trabajadoras se conozcan y se empoderen.

“Al trabajar en centros diferentes los chicos y las chicas no se conocían entre ellos. Había una dispersión total. Ahora se han juntado, han hecho piña, han creado un grupo de watsap, se han empoderado... Se han dado cuenta de que son trabajadores y trabajadoras, que tienen derechos y que deben luchar por ellos, a pesar de que sus jefes les traten en muchas ocasiones como si fueran adolescentes, que si se portan bien serán premiados y si se portan mal castigados...”.

Objetivo: que se apliquen las sentencias ganadas sobre el convenio de aplicación

Así las cosas, era cuestión de tiempo que la situación en Domino’s Pizza explotara. Ahora, además de pedir la readmisión de los trabajadores despedidos, los huelguistas reivindican una mejora sustancial de sus condiciones laborales (están sufriendo la aplicación de acuerdos salariales abusivos), falta de calendario laboral (lo que supone no poder organizar su tiempo libre), abuso en la contratación a tiempo parcial y horas complementarias, falta de medidas de seguridad laboral…

No podemos olvidar que hablamos de un sector con unos sueldos que apenas alcanzan el Salario Mínimo Interprofesional –900 euros– y en los que la inmensa mayoría de contratos son parciales y casi nunca se llega a tener una jornada completa.

Isa García explica que el objetivo final es que se le aplique el convenio de Hostelería de Bizkaia. “Hemos metido varias demandas individuales solicitando que el convenio de aplicación sea el de hostelería de Bizkaia. De hecho, tenemos una sentencia ganada en ese sentido”.

Así las cosas, combinando la lucha sindical, en la calle, y en los tribunales, Isa García se muestra optimista sobre el desarrollo de este conflicto. “No nos vamos a rendir. Una vez acabe junio, si no hay acuerdo, no descartamos más movilizaciones. La plantilla está animada y se siente fuerte para seguir adelante. Y ELA es un instrumento para todo aquel que quiera luchar. Estaremos con ellos y ellas hasta el final”.

El secreto está en la precariedad

Domino’s Pizza es una empresa estadounidense de restaurantes de comida rápida, especializada en la elaboración de pizzas. Fundada en 1960, en la actualidad cuenta con más de 14.500 establecimientos en el mundo repartidos por 90 países. Desde 1998 su máximo accionista es el fondo de capital riesgo Bain Capital. Sin duda, el secreto del éxito económico de este tipo de empresas reside, en gran parte, en la precariedad de la gente que trabaja en ellas: personal joven que ve este trabajo como una salida temporal y coyuntural y que, a priori, no se plantea luchar por sus derechos.

Sin embargo, algo ha empezado a moverse y, en este sentido, Isa García espera que la pelea de Domino’s sirva de ejemplo para otras cadenas de comida rápida como Telepizza. “En Telepizza aplican un convenio estatal. No están aplicando ni siquiera el Salario Mínimo Interprofesional tras la subida: nos tememos que van a absorber los pluses... El sindicato ya ha establecido contacto con trabajadores y trabajadoras de Telepizza a los que estamos haciendo llegar el mensaje de que la lucha da frutos. Confiamos en el efecto contagio de Domino’s”.