Huelga indefinida en la limpieza de las comisarías y edificios judiciales de Gipuzkoa para acabar con la brecha salarial

22/10/2018
Las trabajadoras en huelga desde el 19 de septiembre, denuncian que nadie a accedido a reunirse con ellas, ni la empresa adjudicataria Garbialdi, ni los departamentos de Justicia e Interior del Gobierno vasco. Los sindicatos ELA, LAB, UGT Y ESK convocaron huelga indefinida desde el 17 de octubre en el sector de la limpieza de comisarías y edificios judiciales en Gipuzkoa, que da continuidad a la huelga que comenzó el 19 de septiembre.

Después de varios intentos fallidos para negociar los convenios de limpieza tanto de comisarías, como de edificios judiciales y centros de menores de Gipuzkoa, se constituyen las mesas de negociación el día 26/04/2018. Desde el inicio de las negociaciones la parte social ha centrado su reivindicación en la desaparición de la brecha salarial respecto de la limpieza viaria (sector masculinizado). Los tres sectores (comisarías, juzgados y viaria) se dedican a la actividad de la limpieza y en los tres casos dicha actividad la realizan empresas privadas contratadas por la administración pública. En cambio, las condiciones en las que las plantilla prestan sus servicios son muy distintas, existiendo una clara discriminación salarial en los sectores feminizados con respecto al masculinizados. Discriminación salarial de género que se financia con fondos públicos, con el dinero de todas y todos. En concreto, los datos son los siguientes:

BRECHA SALARIAL: comisarías: 13%, edificios judiciales y centros de menores:7%

El convenio de comisarías finalizó el 31 de diciembre del 2009, en el caso de edificios judiciales el 31 de diciembre de 2017.

Reivindicamos un convenio para las comisarías, de cara a atajar la brecha salarial, con las siguientes subidas:

  • 2016: 3%
  • 2017: 2,9%
  • 2018: 4,5%
  • 2019: 2,5%

Para edificios judiciales, las siguientes subidas:

  • 2018: 4,5%
  • 2019: 2,5%

Desde el 26 de abril hasta ahora hemos mantenido 4 reuniones en las que la negociación no avanzó en ningún sentido, en la única que hay una propuesta salarial es en la reunión última reunión.

En la reunión del 10 de julio GARBIALDI nos traslada que nuestro planteamiento contra la brecha salarial es inasumible, y viene con un planteamiento de congelación salarial en ambos convenios hasta el 2018 inclusive, y para el 2019 una subida del IPC del 2018 para los dos convenios.

Este planteamiento es inaceptable para las/os trabajadoras/es, teniendo en cuenta que las trabajadoras de limpieza de comisarías tienen el salario congelado desde 2008, y en edificios judiciales tenemos una brecha salarial del 7%, con lo cual tampoco es aceptable una congelación salarial.

Por otro lado, los departamentos de interior y justicia del Gobierno vasco no han accedido a reunirse con la parte social para conocer la reivindicación y asumir su parte de responsabilidad en este conflicto. Es más, hasta la fecha, la principal preocupación de ambos departamentos se ha centrado en aumentar los servicios mínimos y en garantizar la limpieza de sus centros, aun a costa de sustituir ilegalmente a trabajadoras en huelga.

En cuanto al resto de contenidos propuestos por la parte social, GARBIALDI no se ha manifestado ni ha entrado a valorarlas. A nuestro entender, es un intento de dilatar la negociación a sabiendas de que los pliegos de adjudicación del servicio de limpieza de comisarías están a punto de publicarse, de forma que la negociación de mejoras salariales quedaría de nuevo bloqueada durante muchos años si no se alcanzase un acuerdo antes de la publicación.

Como no podía ser de otra manera, una vez más son las mujeres las que sufren la precariedad; entre los dos ámbitos suman un total de 60 trabajadoras/es de las cuales un 95% son mujeres. Un alto porcentaje de ellas están con contratos parciales, jornadas muy pequeñas etc. Desde aquí exigimos tanto a GARBIALDI como al Gobierno vasco que actúen de manera inmediata para poner fin a esta situación de discriminación.

La igualdad de género debe materializarse en hechos concretos y no quedar en bonitos discursos. Por ello atajar la brecha salarial existente entre hombres y mujeres debe ocupar un lugar central en la agenda del Gobierno Vasco de forma inmediata.