ELA denuncia la destrucción de empleo prevista en Kutxabank y el deterioro de las condiciones de trabajo
El plan presentado contempla destrucción de empleo, y más precarización. Se fundamenta en 4 medidas, todas ellas encaminadas a la amortización de puestos de trabajo. Entre las medidas planteadas se encuentran las prejubilaciones -que estiman que afecte a un colectivo de 268 personas-, bajas incentivadas, suspensiones de contrato y reducciones de jornada.
Además, la dirección de Kutxabank anuncia que va a incrementar la subcontratación de servicios y la externalización de áreas a empresas de servicios. Otra decisión que conlleva más precariedad laboral a través de salarios más bajos y peores condiciones.
En aras a la eficiencia también dejan claro que su planteamiento implica hacer más funciones con menos personal.
ELA valora de manera muy negativa la propuesta de Kutxabank. La hoja de ruta respecto de la entidad ya está marcada y va en la línea seguida por Euskaltel. La única pregunta que queda sin responder es qué bonus millonarios se van a repartir esta vez.
Kutxabank solo plantea un objetivo: maximizar el beneficio, aunque sea a costa de destruir puestos de trabajo (a los 268 propuestos habría que sumar los 1.098 destruidos en los últimos 4 años, más toda la destrucción llevada a cabo en el empleo indirecto); deteriorar condiciones de trabajo vía externalizaciones; incidir en la línea de la subcontratación, así como aumentar las cargas de trabajo del personal.
ELA considera inadmisible la deriva de la actual dirección y sus responsables políticos en la entidad. No hay Obra Social si se destruye empleo.