Nuevas mobilizaciones en junio y a partir de septiembre con dos días más de huelga en docentes, educación especial, haurreskolas, cocina y limpieza de la educación pública

En cualquier caso, el asunto no estriba solamente en convocar las mesas negociadoras, sino que hay que hacer las oportunas propuestas y poner en marcha una verdadera negociación, cosa que no ha sucedido hasta ahora. Las reivindicaciones a tratar en la mesa negociadora son las siguientes:
- Aumentar la inversión en educación (como mínimo la media de la Unión Europea, hasta alcanzar progresivamente el 6%).
- Incrementar las plantillas al menos en 2.000 personas.
- Reducir la temporalidad del actual 40% (38% personal docente, %41 Haurreskolas, 58% Educación Especial y 63% Cocina y Limpieza) al 6% estabilizando más de 6.000 puestos de trabajo en los diferentes colectivos.
- Reducir las ratios de alumnado un 10%.
- Recuperar el poder adquisitivo del personal de educación.
- Realizar las sustituciones desde el primer día.
- Retribución íntegra de las bajas desde el primer día.
- Recuperar las medidas que facilitan y acompañan la jubilación.
- Sacar la LOMCE de nuestras aulas y derogar Heziberri, mera adaptación de la primera a la CAPV.
- Abandonar la mercantilización de la educación para que, superados los actuales desequilibrios, aquella sea un instrumento de desarrollo personal y social integral (basado en la cohesión social, integración, diversidad, igualdad, coeducación).
- Desarrollar un modelo de inmersión lingüística en euskara que posibilite un alumnado euskaldun y plurilingüe.
- Tener en cuenta la voz y posibilitar la participación de la representación sindical, los agentes educativos y la ciudadanía ante una hipotética Ley de Educación.
Frente a estas reivindicaciones básicas respaldadas por miles de trabajadores/as y ciudadanos/as y a pesar de encontrarnos ya a finales de curso, el Gobierno Vasco no ha dado muestras de querer abordar una verdadera negociación para la mejora de la situación de la actual de la educación pública y la de sus trabajadores/as.
En esta tesitura no vemos otra salida que no pase por la continuación de la dinámica de huelgas y movilizaciones a lo largo de junio y a partir de setiembre.
Concretamente en junio se llevarán a cabo concentraciones y movilizaciones en los centros y en las delegaciones de educación. El 29 de junio, en la plaza de la Virgen Blanca de Gasteiz, se organizará un word-café abierto sobre la situación de la educación pública y sus necesidades.
A comienzos del próximo curso se convocarán concentraciones en los centros, a la vez que dinámicas de diversas iniciativas tanto en los centros, como fuera de ellos: dando clase en la calle, trabajando los efectos y consecuencias de los recortes, y realizando actos alternativos conjuntamente con padres y alumnos/as. A lo largo del mes de octubre se harán encierros en distintos centros, a la vez que se darán conferencias, representaciones teatrales, conciertos y distintas iniciativas para trabajar y socializar nuestras reivindicaciones. En noviembre y diciembre se convocarán dos jornadas de huelga en los diferentes sectores: docentes, educación especial, cocina, limpieza y haurreskolas.
Se hará especial hincapié en el trabajo con familias y la ciudadanía para que en noviembre podamos llevar a cabo movilizaciones conjuntas en Gasteiz, Bilbao y Donostia.
En opinión de los sindicatos resulta imprescindible cambiar de raíz la política educativa y los recortes que el Gobierno Vasco ha ido imponiendo a lo largo de los últimos años y revertir la situación que ello está provocando en la educación publica y en las haurreskolas.
Caso de que el Departamento de Educación siga haciendo caso omiso a estas reivindicaciones básicas para la mejora de las condiciones de trabajo y garantizar el quehacer más fundamental del sistema educativo, no nos dejará otro camino que el de dar continuidad el curso próximo a la dinámica de movilizaciones y huelga.