Miles de personas exigen en la calle un retorno seguro y consensuado en la enseñanza
Los sindicatos venimos reclamando desde principios de mayo del pasado curso al Departamento de Educación la apertura y puesta en marcha de vías de negociación para acordar, tanto una planificación, como los recursos adicionales necesarios para este curso. Ante la inacción del departamento nos vimos obligados a finalizarlo con movilizaciones a favor de un curso presencial seguro y consensuado y hemos tenido que comenzar de nuevo con una dinámica de movilizaciones que ha incluido una jornada de huelga. Si de alguna forma ha sido posible poner en marcha el inicio del curso presencial, ha sido gracias a la implicación y el trabajo de los equipos directivos y del personal de los centros, porque el Departamento de Educación ha fracasado estrepitosamente en la gestión de la pandemia y permanece desaparecido por completo.
El departamento, más allá de las reuniones bilaterales de presentación, no ha dado ningún otro paso. Ha intentado evitar convocar una reunión negociadora sobre contenidos, medidas y recursos concretos. La noticia de la convocatoria de una reunión de todos los sindicatos con el Departamento de Educación para la próxima semana, solo ha llegado después de que tanto los sindicatos como los centros escolares, familias y colectivos hayan llevado a cabo diferentes movilizaciones e iniciativas en las últimas semanas. Además, en los últimos días ha seguido adoptando decisiones unilaterales , con contrataciones precarias no negociadas con los y las representantes de los y las trabajadoras en sectores como la cocina y la limpieza. En estos sectores, guiados de nuevo por la improvisación, se han realizado contrataciones de refuerzo de eficacia muy limitada y que no responden a una planificación concreta, con contratos de cuatro meses que profundizan en la precarización de este personal.
En este curso marcado por la crisis sanitaria, el Departamento de Educación debe asumir la responsabilidad que le corresponde con urgencia y ha de planificar y trasladar a los centros escolares, de forma consensuada, medidas y recursos que garanticen la sanidad y la educación en nuestras escuelas. Eso es lo que reclamamos las personas trabajadoras de educación, las familias y el alumnado a través de múltiples iniciativas y movilizaciones.
En los últimos días hemos recibido cientos de adhesiones tanto de colegios públicos, como de trabajadores/as de ikastolas y centros de iniciativas social, claustros, equipos directivos, trabajadores/as de Haurreskolak, asociaciones de padres y madres, así como de sindicatos y movimientos estudiantiles, a nuestras demandas, tanto a las manifestaciones de hoy como todas las movilizaciones anteriores. Aunque el tiempo no ha acompañado, en las manifestaciones de hoy también han participado miles de trabajadores y trabajadoras, familias y estudiantes.
Nuestras peticiones son claras y por ello solicitamos al Departamento de Educación que acuda a la reunión del 7 de octubre dispuesto a negociar la planificación integral, los criterios comunes y los recursos adicionales necesarios que la situación requiere, y que venga con planteamientos que respondan a las demandas planteadas por la representación del personal.