ELA critica que se dé por finalizado el plan sin apoyo de la plantilla ni de los sindicatos

ELA denuncia que Osakidetza ha dado por cerrado el II.Plan de Igualdad sin ningún apoyo por parte de la plantilla y sin que ningún sindicato haya dado su visto bueno a dicho plan. Ha quedado claro, una vez más, cuál ha sido el objetivo de Osakidetza: contar con un plan formalmente aprobado, porque así lo exige la ley. Osakidetza no ha tenido voluntad real de que este plan sea un instrumento eficaz para hacer frente a las brechas de género que se producen y repiten.

Desde el inicio, denuncia ELA, Osakidetza ha planteado un calendario de negociación absolutamente irreal y no factible. Si realmente se quiere negociar y acordar un plan de igualdad efectivo, Osakidetza deberá abordar los problemas reales que tiene en este ámbito. Un plan que afecta a más de 45.000 personas y que marcará los pasos a dar en los próximos cuatro años no se puede dar por finalizado en el plazo establecido. Además, la participación que se da a los sindicatos ha sido muy escasa. Los plazo para hacer alegaciones a los documentos han sido muy cortos, lo que no permite trabajar cada uno de los documentos con una profundidad mínima.

ELA tiene claro que todo plan de igualdad debe partir de un diagnóstico adecuado, preciso y que explore todos los factores que influyen en las brechas de género. El primer plan partió de un diagnóstico obsoleto e inadecuado y no abordaba cuestiones
que afectan directamente a la plantilla. Lo mismo ocurre con el diagnóstico actual, que no es más que un seguimiento del anterior y no recoge los requisitos mínimos y datos exigidos por la legislación vigente. Así, este plan se ha realizado sin un diagnóstico real y, después de la insistente exigencia por la parte sindical se ha presentado un diagnóstico incompleto.

ELA considera el Plan de Igualdad como una herramienta para abordar real y eficazmente todas las desigualdades de género que se producen o se pueden producir. Critica que el II. Plan de Igualdad tampoco atiende a esas necesidades y que es una herramienta de propaganda de Osakidetza.