ELA denuncia que la Clínica Guimón presente un ERTE cuando siguen sin cubrirse las necesidades de las residencias y de Osakidetza

15/04/2020
ELA acusa a las Direcciones de clínicas privadas de aprovechar la coyuntura para llevar a cabo recortes tomando como excusa la decisión del Departamento de Salud del Gobierno vasco de no derivar allí más pacientes leves con coronavirus, alegando que ha disminuido la demanda de ingresos hospitalarios. Del mismo modo, exige al Gobierno vasco que rectifique y que ponga a disposición de la sociedad vasca todos los recursos sanitarios de los que dispone, sean públicos o privados. El sindicato denuncia que, mientras cientos de personas mayores siguen confinadas y contagiadas en las residencias de toda la CAPV, “el Gobierno vasco se permite el lujo de prescindir de camas hospitalarias y de profesionales”.

ELA  denuncia la decisión de la Clínica Guimón de presentar un ERTE, en vigor desde el 14 de abril, tomando como excusa la decisión del Departamento de Salud del Gobierno vasco de no derivar allí más pacientes leves con coronavirus. Mientras, la plantilla de la Clínica Virgen Blanca está a expensas de lo que decida la dirección del IMQ. Además de denunciar la postura de las clínicas privadas, a quienes el sindicato acusa de aprovechar la coyuntura para recortar empleos, ELA pone en tela de juicio que esa demanda de necesidades en los centro hospitalarios haya disminuido, tal y como asegura el Gobierno vasco. “La cifra de personas mayores contagiadas por el Covid-19 en las residencias es cada vez más alarmante”, subrayan. Además, añaden, aunque los ingresos por coronavirus en Osakidetza hayan disminuido, la carga asistencial  sigue siendo todavía muy importante y toda la actividad sanitaria no urgente está suspendida porque no hay medios para atenderlo. Recuerdan que tampoco existe la certeza de que no haya que reabrir algunas de esas UCIs extras nuevamente.

Por ello, ELA entiende que esos recursos hospitalarios de clínicas privadas de los que el Departamento de Salud ahora prescinde deberían destinarse a procurar una atención específica a las personas contagiadas en las residencias de mayores; y en el caso de Osakidetza, a aliviar la carga asistencial y retomar la actividad ordinaria suspendida.

ELA entiende que los colectivos más vulnerables frente a la pandemia son aquellos a los que hay que proteger de manera especial. “En Bizkaia hay más de 670  mayores confinadas y afectados por el coronavirus en las  residencias, muchos de ellos en situación de extrema gravedad, mientras el Gobierno vasco se permite el lujo de prescindir de camas hospitalarias y de  profesionales”, afirman.

Ante esta situación de emergencia, exige al Gobierno vasco que rectifique y que ponga a disposición de la sociedad vasca  todos los recursos sanitarios de los que dispone (sean públicos o privados), sacando del confinamiento residencial a las personas mayores con covid-19 y procurándolas una atención hospitalaria que no se puede dar en una residencia. Aboga también por la utilización de estos recursos para que Osakidetza alivie su carga asistencial y se empiece a garantizar a la sociedad vasca la atención sanitaria de otras patologías que hasta la fecha han sido suspendidas.