El recorte en la atención en las estaciones y la realización de tareas propias por personal ajeno perjudican a las personas usuarias de Metro Bilbao

Es más que preocupante la descobertura tan abismal que sufren las estaciones desde hace un tiempo, se vuelven a recuperar cifras de viajes diarios previos a la pandemia, pero el servicio de atención a la clientela disminuye a pasos agigantados. Cada día se puede ver que hay mas estaciones sin atender, se crean estaciones de primera y de segunda aun pagando el mismo billete.

Al no haber personal de metro (supervisión de estación) en las estaciones se dejan sin atender labores esenciales para el correcto funcionamiento del servicio. Se perjudica y obstaculiza la prevención y protección de las instalaciones. La empresa sustituye a salto de mata estas funciones con personal ajeno a metro Bilbao, dejando estas personas de realizar su trabajo para hacer labores de personal de Metro Bilbao sin tener la cualificación necesaria. La atención a la clientela es inexistente en situaciones e incidencias graves, perjudicando a las personas usuarias que hacen uso del metro en unas condiciones desiguales ya que en las estaciones desatendidas no hay quien solucione de forma inmediata los problemas. La indefensión de las personas que viajan en metro ante estas situaciones es absoluta.

No se comprende que una empresa como Metro Bilbao, que ofrece un servicio público como es el transporte de personas en un ámbito urbano, prime la rentabilidad del servicio en perjuicio de la atención a las personas.