ELA denuncia que la plantilla de Osakidetza está viendo modificadas sus funciones, su calendario laboral y recortados sus derechos

08/04/2020
ELA critica la falta de planificación y consideración de la dirección de Osakidetza hacia su plantilla, cuyo último ejemplo son las medidas adoptadas para estos días de Semana Santa. Tal y como Osakidetza se ha encargado de anunciar a bombo y platillo, los centros de salud y otros servicios que habitualmente no funcionan los fines de semana o festivos, sí van a funcionar estos días. Aunque se trata de un calendario festivo conocido con antelación, Osakidetza ha esperado hasta este lunes para decretar esa apertura. De esta manera, apenas tres días antes del inicio de la Semana Santa, los/as trabajadores/as tuvieron conocimiento de algo que se debía y podía haber planificado con mayor antelación. Por si esto fuera poco, muchos/as trabajadores/as conocieron la medida por los medios de comunicación.

Así mismo, Osakidetza no ha clarificado cómo va a retribuir o compensar esos servicios. No ha abierto negociación alguna con la representación de los/as trabajadores/as ni tampoco ha realizado comunicación alguna al respecto. Lo único que se sabe es que la plantilla tiene que ir a trabajar y, de momento, hacerse cargo, también, de los gastos adicionales que le puedan provocar las medidas adoptadas para Semana Santa, y también las adoptadas con anterioridad: a algunos/as trabajadores/as se les ha enviado a trabajar a otros centros de trabajo, debiendo asumir esos gastos de desplazamiento.

ELA exige a Osakidetza que proceda a abonar y compensar, de manera inmediata, los servicios extraordinarios que está realizado la plantilla, y ello en la forma y la cuantía acorde al esfuerzo, la exigencia, la improvisación y la falta de planificación a la que están siendo sometidos/as. Asimismo, también solicita que se haga cargo de todos los gastos extraordinarios que los/as trabajadores/as están teniendo que asumir como consecuencia de las medidas organizativas que les están aplicando. Finalmente, el sindicato reivindica que todos aquellos ajustes y reorganizaciones que se deban llevar a cabo, se hagan con la debida coordinación, planificación, comunicación y uniformidad de criterios.

En la actual crisis sanitaria que estamos viviendo, los/as trabajadores/as de Osakidetza están haciendo un enorme esfuerzo, tanto a nivel físico como a nivel psicológico, para para poder asumir la labor asistencial en una situación en la que están desbordados/as y, además, en la que tienen que lidiar, también, con la escasez de EPIs y resto de materiales de protección.

Esta situación de emergencia ha derivado, también, en que muchos de sus derechos laborales se hallen suspendidos o limitados: vacaciones, licencias, permisos, medidas de conciliación, etc. Su única opción a día de hoy es trabajar un día tras otro sin poder acogerse a muchos de los derechos que tienen reconocidos. Por si esto fuera poco, también están a expensas de las medidas organizativas que adopte Osakidetza, de manera que, en este momento, se les modifica de manera unilateral el centro de trabajo, las tareas o el calendario laboral.

Todas estas medidas, que a priori pueden ser comprensibles desde el punto de vista de la emergencia sanitaria en la que nos encontramos, suponen una carga adicional para la plantilla cuando se adoptan sin una mínima planificación y antelación, y cuando se conocen por los medios de comunicación antes que por sus superiores.