ELA pide al Departamento de Educación que ponga en el centro la salud laboral de las y los trabajadores

El Gobierno Vasco ha convocado hoy a los sindicatos a la Comisión de Salud de Educación. Por ello, ELA se ha concentrado ante el Gobierno Vasco en Gasteiz para pedir al Departamento de Educación que ponga en el centro la salud laboral y el bienestar de las y los trabajadores.

Y es que la salud laboral no es una prioridad para el Departamento de Educación. Ejemplo de ello es que los reconocimientos médicos se realizan de media cada 15 años, que los recursos asignados al servicio de prevención son escasos, o que los exámenes de riesgos psicosociales no se han realizado en la mayoría de las escuelas o hace tiempo sin seguimiento.

La escuela pública Francisco de Vitoria, una de las que mayor nivel de segregación tiene en Gasteiz, no cuenta con una evaluación de riesgos psicosociales, por ejemplo. ELA ha denunciado recientemente la situación del centro: más del 60% de la plantilla es temporal, y se están acumulando numerosas bajas por enfermedad. Aunque es responsabilidad del Departamento de Educación garantizar una adecuada organización del trabajo, una plantilla estable, recursos suficientes y un equipo directivo bien formado, el Departamento no tiene realizado en esta escuela ni siquiera el estudio de los riesgos psicosociales.

Los principales perjudicados por esta falta de interés y de voluntad son el personal de Educación, e indirectamente el propio alumnado.

En esta realidad, los y las trabajadoras que sufren enfermedades crónicas se encuentran en una situación más vulnerable. Las necesidades de este personal eran en cierta medida mediante la comisión de servicios. Es decir, existía un mecanismo para asignar algunos puesto adaptados a la situación del profesional. En los últimos 3 cursos, en cambio, el Departamento dejó de utilizar este mecanismo.

Ahora se reconoce al personal la posibilidad de solicitar adaptaciones de puesto de trabajo, pero en muchos casos suelen ser de muy baja eficacia: por un lado, el servicio de prevención cuenta con pocos recursos y las medidas propuestas han sido escasas o tardías; por otro, los criterios de otras áreas suelen prevalecer sobre los del servicio de prevención.

En consecuencia, decenas de personas trabajadoras están siendo obligadas a trabajar en situaciones que ponen en peligro su bienestar físico y/o psíquico. Esto no sólo es inaceptable, sino que significa que el Departamento de Educación no respeta las obligaciones que tiene establecidas por ley.