ELA, Satse, LAB, CCOO y UGT se reafirman en su decisión de no acudir a la mesa sectorial de Sanidad
Los sindicatos SATSE, ELA, LAB, CCOO y UGT han vuelto a trasladar a la Dirección de Osakidetza su negativa a participar, mientras no haya una negociación real, en las reuniones sectoriales que convocan desde el ente público vasco, por tratarse de encuentros vacíos de contenido y con un claro tinte propagandístico, ya que toda la información se traslada previamente a los medios de comunicación. De este modo, hoy 23 de febrero, se han desarrollado diversos actos de protesta en la CAVP desplegando pancartas gigantes tanto en hospitales como centros de salud con el objetivo de reforzar el llamamiento a las huelgas del día 25 y 28, así como a las movilizaciones que junto a agentes sociales se realizarán el día 26 en Bilbao, Donostia y Gasteiz. Es el momento de salir a la calle y trasladar de manera nítida el hartazgo de profesionales y ciudadanía, no es momento de salidas en falso.
Los puntos que Osakidetza incorporó al orden del día de la mesa sectorial “farsa” convocada ayer no van acompañados de documentación enviada de manera previa y con tiempo suficiente para poder ser analizada ya que lo único que buscaba era desactivar las próximas convocatorias de huelga: 25 en la Atención Primaria y 28 de febrero en todo el Servicio Vasco de Salud. Además de esto, Osakidetza no ha incorporado, a ese orden del día, los puntos solicitados por la parte sindical que, el pasado viernes, envió una comunicación a la Dirección de Recursos Humanos con los puntos a tratar, cuestiones todas ellas encaminadas a solucionar los graves problemas estructurales del ente público. En puertas de dos jornadas de huelga, ni se mencionan cuestiones claves como la ampliación de plantilla, su estabilización o la reversión de los recortes aplicados. Además, los puntos del orden del día tienen un carácter informativo por lo que el ente público vasco sigue certificando su nula voluntad negociadora.
Es especialmente llamativo el asunto relativo al desarrollo profesional, porque son los medios de comunicación quienes saben más que los propios firmantes y el resto de miembros de la Mesa. Estas filtraciones a los medios de comunicación ha sido otra de las actitudes que llevan repitiéndose en los últimos años y que también ha provocado el hastío y la denuncia sindical.
El desarrollo profesional es un acuerdo que Osakidetza unilateralmente ha decidido no cumplir hasta la fecha, desde su firma en el pasado mes de julio. Lo único que cabe en relación a ese punto es dejarse de chantajes, y cumplir el acuerdo además del pago de las cantidades adeudadas con las y los trabajadores. Es intolerable que Osakidetza pretenda ahora hacer propaganda a costa de un acuerdo que, de manera unilateral, ha incumplido durante meses. Se trata de la historia de un recorte que se mantiene desde 2011 y que el servicio vasco de salud no tiene voluntad de revertir en su totalidad.
Tay que trasladar a la plantilla la certeza de que Osakidetza tendrá que mover sus posiciones si se presiona con decisión, si una convocatoria de huelga consigue desbloquear asuntos como el desarrollo profesional: "Debemos hacer la reflexión de lo que podemos conseguir con la acción conjunta que supone una huelga".
Asimismo, los sindicatos trasladan "a la ciudadanía en general que la lucha que estamos llevando a cabo no sólo tiene como eje las condiciones laborales, sino que los sindicatos convocantes entendemos que trabajadores y trabajadoras, y usuarios y usuarias nos movilizamos conjuntamente ante el deterioro de nuestro sistema sanitario público, por lo que el movimiento de Osakidetza de intentar neutralizar la huelga con los anuncios hechos públicos ayer, caerá en saco roto".
Finalmente, SATSE, ELA, LAB, CCOO y UGT reiteran su compromiso absoluto con la sanidad pública vasca y contra los ataques que está sufriendo por parte del Gobierno de EAJ-PNV, "a la vez que decimos alto y claro que es el momento de empujar, de movilizarse, de salir a la huelga, no es momento de excusas ni de sentarse a mesas que Osakidetza ha convertido hace tiempo en un instrumento propagandístico".