Las y los médicos de Urgencias del hospital de Galdakao-Usansolo denuncian la precarización del servicio

09/11/2022
Más de quince facultativos y facultativas han compadecido en ELA ante la prensa para denunciar que Osakidetza, pese al aumento de cargas de trabajo de un %20, les está ofreciendo contratos mixtos: 50% en urgencias hopitalarias, %50% en Atención Primaria.

La plantilla de facultativos y facultativas de urgencias del hospital Galdakao-Usansolo, uno de los servicios que más pacientes antiende en urgencias de la CAVP, ha denunciado la precarización del servicio y sus condiciones.

Las cargas de trabajo están siendo inasumibles: en el mes de octubre de 2022, la demanda asistencial aumentó en un 20% respecto del mismo periodo del año anterior. Y es que cuando se cierran consultas o PACs y las listas de espera para atención primaria se prolongan, es habitual que repercuta en el número de pacientes que se atienden en urgencias hospitalarias. Uno de los médicos ha recordado que “las ugencias hospitalarias han sido el comodín para la falta de cobertura de personal en otros niveles de asistencia sanitaria”. Además, aseguran que su servicio tiene la una peculiaridad importante: “venimos asumiendo la asistencia de urgencias del Hospital de Gernika, en que también nos vemos en la tesitura de atender patologías traumatológicas y de pediatría”.

Sin embargo, Osakidetza ha decidido recortar la plantilla de urgencias de Galdakao en un 10%, con el cese de 6 trabajadoras y trabajadores, jugando con las condiciones de trabajo de estas personas y sin respetar la normativa. Osakidetza ha llegado a asegurarles que se les van a mantener los contratos en un inicio, posteriormente se iba a prescindir de todas ellas, y ahora les oferta contratos mixtos, es decir, trabajar el 50% de la jornada en Atención Primaria, y otro 50% en Urgencias. La plantilla en su conjunto ha decidido no aceptar estas condiciones: “Estos contratos mixtos en diferentes puestos de trabajo están siendo una tónica cada vez más habitual en Osakidetza. Tenemos la sensación de ser tan solo fichas que valen para rellernar todos los huecos indistintamente. Y lo más importante, supone la disminución en la calidad de atención a los pacientes, que al final es a quienes protegemos e intentamos ayudar”.

Osakidetza asegura que el origen de todos los problemas que tiene el ente público es la falta de profesionales en todos los niveles, y especialmente facultativas y facultativos, pero también enfermeras y enfermeros. ELA ha lleva años denunciando que el problema real es las condiciones laborales que se ofertan. Osakidetza sufre una fuga de facultativas y facultativos sin precedentes, ya que no se les ofertan unas condiciones laborales que permitan desarrollar un proyecto de vida digno. En muchos casos, estas trabajadoras y trabajadores deciden irse a trabajar al extranjero, buscan salidas profesionales fuera de Osakidetza, o directamente se ven obligadas y obligados a abandonar la medicina. Ante esta situación, en cambio, Osakidetza pretende solucionar una situación provocada por la propia dirección, precarizando aún más las condiciones laborales, y vulnerando los derechos de las trabajadoras y trabajadores.