ELA contra la implantación del 3+2 en el sistema universitario vasco

24/03/2015
Se trata de una amenaza real, que pone en peligro el acceso universal a la enseñanza universitaria, únicamente al alcance de unas pocas élites, pone en riesgo numerosas carreras y muchísimos puestos de trabajo y puede suponer un auténtica desmantelamiento de la universidad pública.

El gobierno español acaba de aprobar el RD 43/2015 modificando la ordenación de las enseñanzas universitarias, el cual posibilita la creación de grados de tres años y másteres de dos.

La principal modificación que implica este RD consiste en la posibilidad de reducir la duración (los créditos) de los grados de cuatro a tres años y ampliar la de los másteres de uno a dos. En la actual realidad universitaria, donde el precio de las tasas va en aumento, la concesión de becas en disminución y el coste económico de los másteres es elevadísimo, algunas de las consecuencias de mayor gravedad de la implantación del 3+2 serían:

  • un notable encarecimiento de la enseñanza universitaria con la consiguiente restricción del derecho a la enseñanza (se restringiría el acceso a las familias con menor poder adquisitivo haciéndola accesible únicamente a las más pudientes);

  • La desaparición de carreras universitarias;

  • Así como la disminución del alumnado con menor poder adquisitivo y la consiguiente destrucción de empleo y de plazas docentes y de investigación.

En definitiva supondría una verdadera involución de la enseñanza universitaria, especialmente de la pública.

Dicho RD deja en manos de cada universidad la decisión de implantar grados de 3 años y másteres de dos a través de sus planes de estudios, planes que habrán de ser autorizados en su implantación por la correspondiente Comunidad Autónoma.

En lo que a la UPV/EHU se refiere, el equipo rectoral ha manifestado su decisión de no aplicar el RD de momento y hasta el 2017. Parece tratarse de una decisión provisional y no definitiva y basada únicamente en una disconformidad respecto al momento de su implantación. De la misma opinión parece ser la consejera de educación Cristina Uriarte.

Se trata de una amenaza real, que pone en peligro el acceso universal a la enseñanza universitaria, únicamente al alcance de unas pocas élites, pone en riesgo numerosas carreras y muchísimos puestos de trabajo y puede suponer un auténtica desmantelamiento de la universidad pública.

Esta decisión se suma a los incesantes recortes que tanto el Gobierno Vasco como el equipo rectoral están imponiendo en la universidad y al proceso de reorganización de centros que ponen en peligro cientos de puestos de trabajo y puede suponer el empeoramiento de las condiciones laborales.

Es por ello por lo que ELA rechaza este RD y exige al Gobierno Vasco y al equipo rectoral de la universidad que defiendan un sistema educativo vasco propio que garantice una educación universitaria integral de calidad y universal, al servicio de las necesidades de la sociedad vasca y alejada del control de los intereses privados y reservado a unas pocas élites. Modelo por el que parece apostar la reforma del Gobierno español.