RESIDENCIAS PRIVADAS Y VIVIENDAS COMUNITARIAS (ARABA)

Amplio seguimiento a la huelga

04/10/2023
Las trabajadoras de residencias privadas y viviendas comunitarias vuelven a secundar el segundo día de huelga reclamando el primer convenio provincial que les garantice un modo de vida digno. La huelga ha tenido un amplio seguimiento en las 12 residencias privadas en las que ELA tiene representación, sobre todo en la categoría de auxiliares y gerocultoras, un seguimiento muy considerable teniendo en cuenta los servicios mínimos abusivos del sector, que son de hasta el 70%

Las trabajadoras de residencias privadas y viviendas comunitarias de Araba han vuelto a salir a la calle para reclamar un convenio que les asegure unas condiciones laborales dignas. ELA, el sindicato mas representativo en el sector, junto con LAB, ha convocado esta segunda jornada de huelga ante la pasividad de las instituciones y la poca voluntad de las empresas para negociar.

Desde primera hora de la mañana se han realizado piquetes informativos por varias residencias de la ciudad, informando de los servicios mínimos y motivando a las trabajadoras a secundar la huelga para mejorar sus condiciones laborales. A las 11 se ha realizado una concentración en la Residencia Palacio de la Burullería, y desde allí a marchado poco después la manifestación por el centro de la ciudad, pasando por las oficinas de Inspección de Trabajo donde las trabajadoras han hecho entrega de un escrito solicitando que las inspecciones sean mas exhaustivas y se impliquen más en la mejora de las condiciones de las trabajadoras, y la manifestación ha concluido en la Plaza de la Provincia donde las trabajadoras han realizado una sentada en las escaleras de Diputación en modo de protesta.

Teniendo en cuenta los servicios mínimos que tenemos en este sector de los cuidados, 70% en gerocultores o auxiliares de enfermería, DUE personal sanitario 50% y técnicos 50%, desde ELA valoramos muy positivamente este día de huelga en el sector, ya que aún y con todos los impedimentos, hemos conseguidos sacar a muchas compañeras a la calle para reivindicar una calidad de vida digna.

A día de hoy, la patronal ofrece a estas trabajadoras un salario irrisorio de 1350€ euros para el 2028 y que sigan trabajando la barbaridad de 1742 horas anuales, de los ratios y de las multitareas mejor ni hablamos. La postura intransigente de la patronal, y la no voluntad de mejorar las condiciones precarias de este sector feminizado y racializado, dejan en evidencia que la patronal está muy cómoda en su postura.