El Gobierno Vasco sigue sin hacer las sustituciones de docentes desde el primer día

25/09/2018
Representantes de los sindicatos Steilas, LAB, CCOO y UGT subrayaron que el acuerdo sobre docentes de la red pública de la CAPV permitía la realización de sustituciones desde el primer día de baja. Sin embargo, el Gobierno Vasco está incumpliendo el acuerdo. ELA exige al gobierno que reemplace a las personas que estén de baja desde el primer día, y que tome medidas y destine recursos ara poner fin a los recortes impuestos durante tantos años.

Tal como hemos venido denunciando en los últimos cursos, con el pretexto de la crisis el Gobierno Vasco (con el respaldo del PNV, PSE y PP) nos ha impuesto fuertes recortes en los servicios públicos, descapitalizándolos. En la enseñanza pública la inversión se ha reducido sustancialmente (ha pasado del 4,3% del PIB en 2009 al 3,5% en 2018, lo que implica una rebaja de 596 millones de euros). Por supuesto, ello ha tenido un grave impacto en la red educativa pública: el aumento de la matriculación y la decisión política de no incrementar el número de aulas ha supuesto un incremento de ratios del 9,1% y que se hayan dejado de crear unas 1.800 plazas, lo que ha acarreado un fuerte aumento de las cargas de trabajo, una temporalidad del 38%, mientras que el personal docente ha sufrido un 15% de pérdida de su poder adquisitivo, se ha penalizado el hecho de enfermar, se han eliminado o restringido las medidas que facilitaban la jubilación...

Ante esta situación, el Gobierno no nos dejó otra salida que la movilización. ELA, junto con LAB y Steilas, emprendió una potente dinámica de movilizaciones y huelgas; el amplio seguimiento que tuvieron dejó en evidencia que las personas que trabajan en el sector somos conscientes de la situación, estamos dispuestas a denunciarlas y a luchar para conseguir que haya cambios.

Aunque las huelgas y movilizaciones obligaron a moverse al Gobierno, sus propuestas seguían muy alejadas de las necesidades de la educación pública y de nuestras reivindicaciones. Desafortunadamente, cuando entrábamos en una fase de mayor presión y movilización, LAB, en primer lugar, y Steilas, más adelante, cayeron en la estrategia del Gobierno Vasco y desmovilizaron a trabajadores y trabajadores, firmando acuerdos en Haurreskolak (LAB, en solitario), y posteriormente en Educación Especial y Cocinas y Limpieza, antes de hacer lo mismo con el profesorado. Perdimos una oportunidad histórica para hacer frente a los recortes y responder a las necesidades de la enseñanza pública.

El preacuerdo firmado el pasado mes de mayo por el Gobierno Vasco con Steilas, LAB, CCOO y UGT no satisfacía las revindicaciones que nos llevaron a movilizarnos (reducción de ratios e incremento de plantillas, recuperación del poder adquisitivo, restablecimiento de las primas de jubilación y medidas que faciliten ésta, reducción de la eventualidad al 6% y garantía de consolidación de las plantillas). Fue lo que ELA denunció en mayo.

El acuerdo solo abordaba una de las reivindicaciones que nos llevaron a la huelga: la realización de sustituciones desde el primer día.

Por desgracia, con el comienzo del curso escolar han empezado a salir a la luz los déficit de los acuerdos firmados y la falta de voluntad para cumplirlos por parte del departamento de Educación. Las sustituciones no se efectúan desde el primer día porque el Gobierno no ha previsto recursos para hacerlo. Las horas lectivas reducidas por motivos de edad se están gestionando mediante las guardias. No hay ninguna intención de recuperar el poder adquisitivo, tal como denunciamos todos los sindicatos tras la reunión de la Mesa General del pasado 19 de septiembre, ni de restablecer las primas de jubilación. Las ratios siguen como estaban; las medidas previstas en torno al índice de necesidades educativas y las aulas de 3º de infantil han tenido efecto en muy pocos centros escolares, y apenas han aliviado la carga de trabajo. Además, siguen en el aire y sin concretarse reivindicaciones imprescindibles para remediar las carencias básicas de la educación pública y mejorar las condiciones de trabajo, como la reducción de la temporalidad al 6% o las medidas para garantizar la estabilidad de las plantillas mediantes procesos de consolidación del empleo.

Por tanto, ELA llama a las personas que trabajan en la red educativa pública a organizarse y a luchar para hacer frente a esta situación, y exige al departamento de Educación que renuncie a las políticas de reducción y empiece a tomar medidas para dar solución a los déficit de nuestro sistema educativo y mejorar las condiciones de trabajo.