ELA denuncia que las 3.535 plazas de Osakidetza anunciadas son insuficientes para los 24.600 trabajadores y trabajadoras temporales
Así las cosas, el sindicato subraya que la OPE que Osakidetza va aponer en marcha perpetua las tasas de temporalidad. “Miles y miles de temporales invertirán su tiempo en preparar y participar en el proceso selectivo con el único objetivo de formar parte de las listas de contratación temporal y seguir así encadenando contratos temporales, ya que, a la vista del número de plazas ofertadas, es muy improbable que puedan obtener una plaza fija”, lamenta. Además, estamos ante un proceso ordinario y no ante un proceso de consolidación de trabajadores y trabajadoras temporales, que llevan largos años sacando adelante el servicio público en condiciones precarias. ELA ha solicitado, de manera reiterada, la suspensión de esta OPE hasta que se clarifique el alcance del proyecto de Ley que se está tramitando en el Congreso español. El objetivo es que se puedan incluir estas plazas en un verdadero proceso de consolidación del personal temporal.
Además, y como ya denunció hace algunas semanas, Osakidetza no garantiza la transparencia y la imparcialidad en la elaboración de los exámenes de la OPE. Tras el fraude de la OPE anterior -que todavía está en manos de los Tribunales-, la propia Consejera anunció en sede parlamentaria que, para evitar que se repitieran situaciones como las que llevaron a ELA a presentar una denuncia en la Fiscalía, la confección de los exámenes iba a ser asumida por el IVAP bajo la premisa de que los mismos debían ser elaborados por profesionales de fuera de Osakidetza. Pues bien, en la última Mesa Sectorial, Osakidetza anunció de manera sorpresiva que, finalmente, el IVAP no será el encargado de confeccionar los exámenes, dejando en manos de los Tribunales Calificadores la decisión sobre la elaboración de los mismos.
“Sin duda alguna, esta decisión supone un paso adelante en el mantenimiento de un sistema y una cultura de selección, cuyo buen ejemplo, es la última OPE. Ya denunciamos entonces, que lo ocurrido en aquella OPE no era un fenómeno aislado y sin lugar a dudas, otorgar ahora a los tribunales esa responsabilidad y desechar la opción del IVAP, supone un paso más en el mantenimiento de este sistema”, denuncia. Cabe recordar que la propia fiscalía ya señaló la confección de los exámenes como una de las cuestiones clave en las filtraciones de los mismos durante la última OPE.
Por todo ello, ELA exige a Osakidetza que dé los pasos necesarios para poner fin al problema de la temporalidad y para garantizar, de una vez por todas, una selección transparente e imparcial, que garantice la igualdad de oportunidades y los principios que deben regir el acceso al empleo púbico. “Todo ello es condición indispensable para el necesario fortalecimiento de los servicios públicos y para cerrar la puerta a la privatización”, concluye.