ELA solicita que un servicio esencial como es el de Bizkaibus sea reorganizado para dar un servicio de calidad

Desde el inicio de la pandemia ha quedado en evidencia un servicio de transporte como el de Bizkaibus, que está en manos de varias empresas que obtienen beneficios millonarios anuales de las arcas publicas. En este contexto no han dudado en poner en segundo plano la seguridad y la salud de los trabajadores y trabajadoras, y también de las personas usuarias. En el caso de los trabajadores y trabajadoras, han tenido que ser estos los que incidan en disponer de geles, mascarillas, inhabilitar el acceso delantero, y ahora en la petición de instalación de sistemas de aislamiento para la hipotética apertura de la puerta delantera. Las empresas han respondido racionando EPIs, dando líquido para lavar las manos a cuentagotas y no limpiando el puesto de trabajo. Por su parte, la Diputación Foral de Bizkaia, ha suprimido el servicio de desinfección durante la jornada, relativiza la masificación que se da en algunas líneas y que será más evidente en septiembre haciendo imposible el mantener la distancia de seguridad, y ha dejado sin un servicio de desinfección que minimice el riesgo de transmisión del COVID-19.

Bizkaibus es gestionado por empresas con importantes beneficios, que deberían estar destinados a prestar un mejor y mayor servicio a la ciudadanía bizkaina. Solo un lote de Bizkaibus es gestionado por Euskotren, sociedad pública que va por delante del modelo de gestión. En este contexto ELA quiere exigir a la administración que realice un control exhaustivo de las partidas presupuestarias destinadas a Bizkaibus, para no permitir especulaciones y que en este contexto estas empresas multinacionales aumenten sus beneficios. Esto ya está pasando en el caso de Ezkerraldea Meatzaldea Bus o Busturialdea Lea Artibai Bus, gestionadas por el grupo ALSA que pretende descontar parte de la jornada a la plantilla, mientras recibe la totalidad de fondos públicos, con el único fin de aumentar sus beneficios.

ELA exige a la Diputación Foral de Bizkaia, un servicio público de calidad, que no se aumenten las privatizaciones del propio servicio de Bizkaibus ni de actividades relacionadas con la prestación del mismo como son talleres o mantenimiento que son fundamentales para dotar de seguridad al mismo. Asimismo exige que se apueste por un mayor control de las empresas que prestan este servicio y por la gestión pública de este servicio esencial.