Osakidetza : Colapso por Navidades

03/01/2018
Tal y como venimos denunciando desde ELA, Osakidetza no dispone de suficientes médicos para atender las necesidades que se producen con carácter habitual en la Anteción Primaria, situación que ha llegado a un punto crítico, por segundo año consecutivo, en el período navideño, lo que ha derivado en un colapso tanto de la Atención Primaria, como de las urgencias hospitalarias.

Una vez más, la situación de precariedad que se vive en Osakidetza ha llegado a una situación límite en el período navideño. Las direcciones, en muchos casos, han denegado permisos a los que la plantilla tiene derecho, y aún así no hay personal suficiente para dar una atención mínima. Ello ha dervidado en que se estén viviendo situaciones de saturación y colapso tanto en la Atención Primaria, como en las urgencias hospitalarias.

Muchos centros de Atención Primaria han reducido su horario de atención, las vacaciones y permisos que se acumulan en el período navideño, en muchos casos, no han sido sutituídos, lo que sumado a la ya raquítica plantilla estructural de Osakidetza y a la falta de médicos de Atención Primaria, ha derivado en el colapso y la sobrecarga tanto de la Atención Primaria como de los PACs y de las urgencias hospitalarias. A todo esto tenemos que añadir que la gripe se halla en tasas epidémicas.

Esta situación se repite de manera sistemática durante las Navidades. La conclusión es clara: no existe Atención Primaria en el período navideño, únicamente existe un apoyo descentralizado a los servicios de urgencias, que también se ven afectados por la falta de recursos en la Atención Primaria.

En la base de esta situación se encuentra la insuficiencia de médicos. Esta falta de profesionales no es accidental, responde a la falta de previsión de los responsables políticos. La inversión en formación no tiene rentabilidad política para quien la impulsa (el personal médico necesita 10 años de formación) y los políticos prefieren invertir en edificios en lugar de en profesionales.

Al mismo tiempo, Osakidetza mantiene una temporalidad del 40%, situación que no sufrirá una mejora significativa con las OPEs que anuncia a bombo y platillo. En esta situación, ni siquiera se preocupa por fidelizar mediante una contratación de calidad a los profesionales que forma, por ello hay profesionales que emigran tras haber costeado la sociedad toda su formación.

Estos recortes son una invitación a la privatización. Recordemos situaciones como las del Hospital de Urduliz en el que, tras una inversión millonaria, los quirófanos siguen cerrados. O el Hospital San Eloy, en el que la plantilla lleva semanas movilizándose precisamente porque la dirección ha decidido suspender, la actividad quirúrgica concertada de tarde, con el consiguiente cierre de 36 camas, el 30% de las existentes.

ELA exige que se le de un tratamiento urgente a esta situación. ¿Qué pasará cuando aumente el ritmo de jubilaciones los próximos años? Estas Navidades sólo son una muestra de la Atención Primaria que nos viene.