Si el lehendakari Urkullu plantea recortes en los servicios públicos tendrá una respuesta contundente
El lehendakari ha olvidado muy rápidamente el compromiso de las miles de personas que trabajan en los servicios públicos y que han arriesgado su vida. Al estilo de la presidenta madrileña, este fin de semana manifestaba “que ante el colectivo de más de cerca de 190.000 personas que están en ERTE existe otro colectivo que tiene estabilidad laboral y garantía de su puesto de trabajo. Y que no tiene duda de que los funcionarios tendrán en cuenta el esfuerzo que se esta haciendo en el sector privado”. Con estas palabras seguía la linea marcada ya por su compañero de partido Joseba Egibar, que en una entrevista a Berria,hace más de un mes, manifestaba “ que las y los trabajadores públicos deberán realizar su aportación para salir de la crisis”.
ELA quiere denunciar que esas palabras del lehendakari Urkullu y Joseba Egibar no buscan la solidaridad entre colectivos, sino poner en el punto de mira, una vez más, a las y los trabajadores de los servicios públicos y de paso, aplicar nuevos recortes sobre sus condiciones de trabajo y los servicios que ofrecen. Llama la atención que en toda la entrevista el lehendakari ni siquiera mentase la opción de aumentar impuestos a las rentas altas o a los beneficios empresariales para hacer frente al déficit presupuestario que prevé.
El lehendakari miente cuando habla de un colectivo “que tiene estabilidad laboral y garantía en su puesto de trabajo”. Su apuesta sistemática por recortar los presupuestos públicos, ha traído consigo que más del 35% de las y los trabajadores públicos tengan un contrato temporal. Hoy más de 15.000 trabajadoras/es de Osakidetza son temporales, 13.000 en Educación, miles en la Administración General… Alrededor de 40.000 personas son temporales en el ámbito público que dirige el lehendakari Urkullu. Previo al COVID-19, el porcentaje de temporalidad del sector público era 12 puntos mayor que el del sector privado, y la pérdida del poder adquisitivo de las y los trabajadores públicos del 13 % en esta última década.
ELA exige al lehendakari Urkullu que haga un ejercicio de transparencia y explique de manera clara y nítida, y con anterioridad a las elecciones del 12 de julio, cuales van a ser sus decisiones respecto al empleo y las condiciones laborales de las y los trabajadores públicos, para que sepan antes de votar que pasará con su puesto de trabajo y sus condiciones laborales, petición que hacemos extensible al resto de formaciones políticas que se presentan a las elecciones .
Esta pandemia nos ha dejado una lección muy clara: la de que es absolutamente fundamental reforzar los servicios públicos. No es momento de discutir como recortar el gasto en los servicios públicos, sino de hablar de cómo se refuerzan. Esta crisis ha certificado el fracaso de la apuesta por la privatización de sectores completos como el de los cuidados. Es momento de reforzar los servicios públicos, con más plantillas y con mejores condiciones de trabajo. Es lo que requiere la sociedad y lo que se han ganado estas personas durante estos meses (también).
Por ello, ELA pondrá todos sus esfuerzos en reforzar los servicios públicos y poner los recursos públicos al servicio de las personas, y en organizar a los trabajadores y las trabajadoras para que con movilizaciones contundentes y continuadas en el tiempo, las y los trabajadores públicos, otra vez, no sean los paganos de esta crisis. No vamos a permitir que se dejen de oír los ecos de los aplausos que toda la sociedad ha dado a las personas que trabajan en los servicios esenciales, y buscaremos la alianza con otras organizaciones sindicales y sociales para dar la respuesta más firme posible.