Trabajadoras de Dentix sin garantías de cobrar aunque vuelvan a trabajar después del ERTE

12/05/2020
Para ELA, los contenidos del acuerdo no han sido suficientes para la firma, ya que no se responsabiliza a la empresa de los complementos salariales y de pluses; no facilita que las mujeres embarazadas reciban la prestación por riesgo de embarazo para evitar el consumo de desempleo; y no ofrece soluciones para las personas que están pendientes de reincorporarse a su puesto de trabajo cuando finalizan la prestación por desempleo.

La clínica Dentix cuenta con un total de 17 locales en Hego Euskal Herria en los que trabajan más de 260 trabajadores, superando en más de 3.000 trabajadores a España. Esta empresa, que cuenta con una plantilla mayoritaria de mujeres, puede atender a más de 10.000 clientes por centro.

El 18 de marzo, a raíz del estado de alarma que se estableció como consecuencia del Coronavirus, las trabajadoras se trasladaron a un ERTE en el que todavía permanece. No obstante, hay que señalar que por parte de la empresa no se les abonaron los 17 días de marzo, por lo que teniendo en cuenta que el pago del Sepe se produjo el 2 de mayo, estas trabajadoras sobrevivieron con el salario de febrero durante 2 meses y sin variables.

El pasado 13 de abril la empresa comunicó su incorporación al curso preliminar de Acreedores por su precaria situación económica.

El 29 de abril se informó de la negociación de un ERTE por motivos técnico-organizativos. A pesar de que ELA tiene 3 de 123 delegados, conseguimos estar en la mesa de negociación a nivel estatal, compuesta por 10 representantes de CCOO, 2 de UGT y uno de ELA.

Tras 7 días de negociación, entre las medidas acordadas por la empresa con CCOO está la permanencia del ERTE hasta el 31 de diciembre y la incorporación del 30% de la plantilla al 50% de la jornada. Lo que desde ELA hemos venido defendiendo desde el principio ha sido la inmediata incorporación de toda la plantilla, prolongando el ERTE hasta un máximo de septiembre y poniendo la plantilla a trabajar al 100% desde el principio, ya que consideramos que es la única medida adecuada para que el personal vuelva a la normalidad y ofrezca un buen servicio.

 Para ELA, los contenidos del acuerdo no han sido suficientes para la firma, ya que no se responsabiliza a la empresa de los complementos salariales y de pluses; no facilita que las mujeres embarazadas reciban la prestación por riesgo de embarazo para evitar el consumo de desempleo; y no ofrece soluciones para las personas que están pendientes de reincorporarse a su puesto de trabajo cuando finalizan la prestación por desempleo.

Por otro lado, deja algunas dudas en el aire que la empresa no nos ha aclarado. Por ejemplo, dentro de esa actividad inicial, ¿a quién priorizarán? Si el tratamiento se da a gente que ya lo tiene pagado, no hay ingresos en la empresa; si se da a nuevos clientes, dejan colgados a los que ya han tienen pagado; y si es una combinación entre ambos, no sabemos nada sobre los criterios que van a utilizar para dar paso a los antiguos clientes.

Además, y dado que la boca es una fuente importante de riesgos biológicos, la empresa no nos ha aclarado qué protocolo utilizará para evitar la contaminación entre clientes y trabajadores, ni cómo obtendrá las EPIs si la situación económica de la empresa es tan mala.

Cabe destacar que la postura de ELA en la mesa ha tenido una gran repercusión y que trabajadores de todo el Estado se han puesto en contacto con nosotros, tanto para aplaudir nuestras peticiones como para preguntarnos la manera de afiliarse, como por ejemplo desde Sevilla o Málaga.

Por último, ELA recuerda que este es un sector feminizado y muy precarizado. Por ello, en ningún caso aceptamos la precaria situación que las deja este ERTE y comunicamos que vamos a mirar si existe o no la posibilidad de impugnar jurídicamente el acuerdo e introduciremos demandas de cantidades individuales para que la empresa devuelva lo que les debe a las trabajadoras.